/ jueves 7 de febrero de 2019

Las organizaciones y sus chantajes

Las organizaciones sociales en Chiapas siempre han existido desde hace muchos años, unas violentas, otras no tanto y muchas más a doc al sistema de gobierno, que se vuelven la moda del sexenio, convirtiéndose en grupos de choque.


Para nadie es un secreto que en el sexenio pasado el Movimiento Campesino Regional Independiente (Mocri) se volvió la más fuerte, sobre todo por el grado de violencia que ello implicaba en sus acciones, siempre portando garrotes en cada manifestación.

Se volvieron los invasores de moda, al grado que a la fecha los propietarios siguen esperando haya justicia y les sean devuelta sus predios, incluso se han dado el lujo de “vender” los lotes de los que se han apropiado.

Ahora la “moda” de éstos es irse a plantar al Palacio de Gobierno para exigir se les legalice lo que agarraron a la mala, a través de la invasión y si se aplica la ley se dicen reprimidos, temerosos de sus vidas.

Ahora la Confederación Revolucionaria de Obreros Mexicanos del Estado de Chiapas (Cromech), tiene con el Jesús en la boca a los de San Cristóbal de Las Casas, porque han estado realizando desmanes para exigir la liberación de su dirigente, Martín Pale, a quien se le aplicó la ley por el delito de extorsión.

El secretario de gobierno, Ismael Brito se ha sentado con varias organizaciones, pero queda claro que es necesario, además la aplicación de la ley sin miramiento de siglas, porque no se puede seguir permitiendo que bloqueen carreteras como lo hacen estos grupos, o que otros encapuchados les dé por tomar las casetas y se atrevan a cobrar hasta 300 pesos por cada vehículo, si éste quiere continuar su camino.

La tolerancia definitivamente debe tener límites y para los chiapanecos ese límite ya llegó, cansados de ver como las organizaciones han hecho lo que mejor les parece, sin que nadie les diga nada, de cómo pasaron de pedir tierras a convertirse en “transportistas”, e incluso portar sólo una placa con las siglas del grupo al que pertenecen, como si fuera una protección, un sinónimo de ser intocables.

Si las cosas no se les pone un alto y se les deja de permitir que sigan manifestándose de manera violenta, pueden suceder dos cosas: la primera que éstos aumenten su agresividad o que aparezca otro grupo que los enfrente, cansados de ser las víctimas de la situación.

Por ello, las autoridades de los tres niveles de gobierno están obligados a realizar las acciones necesarias para poner un hasta aquí a quienes no cumplen con la ley, y frenar el negocio de las organizaciones, sobre todo de sus líderes, porque más de uno, sin ser discriminativo, aparecen con huarache y terminan con bota de piel y la militancia sigue pidiendo tiempo después, exactamente lo mismo que al principio.


BASE DE DATOS…-

Siguen las molestias en la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach), porque las exigencias de que se realice una auditoría a la administración del rector Rodolfo Calvo, no cesan de parte de los alumnos.

Además continúan las acusaciones por nepotismo, pues dicen los enterados que ahora Luis Alberto Cabrera Victoria, sobrino del rector, fue nombrado nuevo director de la Facultad de Ciencias Humanas y Sociales, además de que no hay que olvidar que su hermanito José Julio César González Fonseca, es su secretario particular; además de que Ariel Gómez sigue trabajando bajo el agua en dicha universidad, es decir, nunca fue despedido.***

Sigue el problema de la secundaria “Rafael Ramírez Castañeda”, en la colonia Rivera Cerro Hueco, en esta ciudad capital, donde primero se desmayaron 22 estudiantes, ayer tres y con los de este jueves suman 40 alumnos que se han quejado de mucho dolor en la cabeza y estómago.

De éstos hay que recordar que dos estuvieron en coma, en condiciones de salud muy delicada, afortunadamente van superando el cuadro; sin embargo, hasta el momento, la Secretaría de Salud no ha dado una explicación real del por qué estos niños se están desmayando.

La Secretaría de Salud se limita a decir que “en el recorrido realizado por las brigadas sanitarias se localizaron garrafas de aguarrás, preservativos usados y una bolsa negra con plumas de pollo y una cabeza de gato”.

Además de que los alumnos “ingirieron un agua preparada, la cual es proveída por los mismos compañeros del salón y al parecer es la que causó dichos síntomas”.***


Correo: ramirezirma77@hotmail.com

Facebook: irmaramirez.mx

Twitter: @irmajaque

Las organizaciones sociales en Chiapas siempre han existido desde hace muchos años, unas violentas, otras no tanto y muchas más a doc al sistema de gobierno, que se vuelven la moda del sexenio, convirtiéndose en grupos de choque.


Para nadie es un secreto que en el sexenio pasado el Movimiento Campesino Regional Independiente (Mocri) se volvió la más fuerte, sobre todo por el grado de violencia que ello implicaba en sus acciones, siempre portando garrotes en cada manifestación.

Se volvieron los invasores de moda, al grado que a la fecha los propietarios siguen esperando haya justicia y les sean devuelta sus predios, incluso se han dado el lujo de “vender” los lotes de los que se han apropiado.

Ahora la “moda” de éstos es irse a plantar al Palacio de Gobierno para exigir se les legalice lo que agarraron a la mala, a través de la invasión y si se aplica la ley se dicen reprimidos, temerosos de sus vidas.

Ahora la Confederación Revolucionaria de Obreros Mexicanos del Estado de Chiapas (Cromech), tiene con el Jesús en la boca a los de San Cristóbal de Las Casas, porque han estado realizando desmanes para exigir la liberación de su dirigente, Martín Pale, a quien se le aplicó la ley por el delito de extorsión.

El secretario de gobierno, Ismael Brito se ha sentado con varias organizaciones, pero queda claro que es necesario, además la aplicación de la ley sin miramiento de siglas, porque no se puede seguir permitiendo que bloqueen carreteras como lo hacen estos grupos, o que otros encapuchados les dé por tomar las casetas y se atrevan a cobrar hasta 300 pesos por cada vehículo, si éste quiere continuar su camino.

La tolerancia definitivamente debe tener límites y para los chiapanecos ese límite ya llegó, cansados de ver como las organizaciones han hecho lo que mejor les parece, sin que nadie les diga nada, de cómo pasaron de pedir tierras a convertirse en “transportistas”, e incluso portar sólo una placa con las siglas del grupo al que pertenecen, como si fuera una protección, un sinónimo de ser intocables.

Si las cosas no se les pone un alto y se les deja de permitir que sigan manifestándose de manera violenta, pueden suceder dos cosas: la primera que éstos aumenten su agresividad o que aparezca otro grupo que los enfrente, cansados de ser las víctimas de la situación.

Por ello, las autoridades de los tres niveles de gobierno están obligados a realizar las acciones necesarias para poner un hasta aquí a quienes no cumplen con la ley, y frenar el negocio de las organizaciones, sobre todo de sus líderes, porque más de uno, sin ser discriminativo, aparecen con huarache y terminan con bota de piel y la militancia sigue pidiendo tiempo después, exactamente lo mismo que al principio.


BASE DE DATOS…-

Siguen las molestias en la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach), porque las exigencias de que se realice una auditoría a la administración del rector Rodolfo Calvo, no cesan de parte de los alumnos.

Además continúan las acusaciones por nepotismo, pues dicen los enterados que ahora Luis Alberto Cabrera Victoria, sobrino del rector, fue nombrado nuevo director de la Facultad de Ciencias Humanas y Sociales, además de que no hay que olvidar que su hermanito José Julio César González Fonseca, es su secretario particular; además de que Ariel Gómez sigue trabajando bajo el agua en dicha universidad, es decir, nunca fue despedido.***

Sigue el problema de la secundaria “Rafael Ramírez Castañeda”, en la colonia Rivera Cerro Hueco, en esta ciudad capital, donde primero se desmayaron 22 estudiantes, ayer tres y con los de este jueves suman 40 alumnos que se han quejado de mucho dolor en la cabeza y estómago.

De éstos hay que recordar que dos estuvieron en coma, en condiciones de salud muy delicada, afortunadamente van superando el cuadro; sin embargo, hasta el momento, la Secretaría de Salud no ha dado una explicación real del por qué estos niños se están desmayando.

La Secretaría de Salud se limita a decir que “en el recorrido realizado por las brigadas sanitarias se localizaron garrafas de aguarrás, preservativos usados y una bolsa negra con plumas de pollo y una cabeza de gato”.

Además de que los alumnos “ingirieron un agua preparada, la cual es proveída por los mismos compañeros del salón y al parecer es la que causó dichos síntomas”.***


Correo: ramirezirma77@hotmail.com

Facebook: irmaramirez.mx

Twitter: @irmajaque

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