Primero los mexicanos y después los migrantes dicen los senadores, pero queda claro que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, piensa y hace lo contrario, porque va entregando 90 millones de dólares a los países de El Salvador, Guatemala y Honduras.
30 millones de pesos a cada país les dio para ayudar al fenómeno de migración, luego de las caravanas que se dejaron venir al país y sobre todo de la amenaza del presidente de Estados Unidos, Donald Trump por permitir el paso de los indocumentados.
Así sin tomar en cuenta a los senadores que coinciden que primero se debe atender las necesidades del país y después la de los migrantes, AMLO avanza en su programa de ayudar a los países centroamericanos, sin importar la ola de inconformidad y el sentimiento que está creciendo entre los mexicanos, sobre todo los más afectados que no ven llegar el apoyo prometido.
Tiene razón el senador Eduardo Moreno cuando señala que México no está en condiciones de ser un tercer país seguro, pues significaría darle la oportunidad de asilo a migrantes de todas partes del mundo, no sólo de Centroamérica, lo que representaría destinar recursos exclusivamente para ellos.
Y es que en México aún se carece de lo básico necesario en muchas partes del país, como son: empleo, salud, educación, vivienda, entre otros, pues basta ver las peticiones del pueblo para saber que en casa todavía no se tiene lo suficiente.
Sin embargo, a pesar de que la Guardia Nacional y otras corporaciones policiacas han estado evitando el ingreso de los migrantes al país, que no cuentan con su documentación en regla, el tráfico de personas continúa a la orden del día, es decir, no frena el fenómeno porque siguen usando los caminos de extravío.
Eso sin contar el sin fin de migrantes que sigue dándoles vuelta en la cabeza la “invitación” de López Obrador, de que eran bienvenidos y tendrían trabajo, acción por la cual obligan a las empresas mexicanas a contratar a un porcentaje de quienes no tienen papeles, para que se diga que AMLO sí cumple, sin importar el sentimiento del pueblo.
Peras o manzanas, salieron ya del país 90 millones de dólares, los cuales vaya que hacen falta, sobre todo en Chiapas, donde se ha tenido fuertes problemas por las deudas heredadas del sexenio pasado, la falta de medicamentos, entre otros.
Quizá hubiese sido mejor invertir ese dinero en la frontera para evitar que pasen los migrantes, porque al final es un fenómeno que va a continuar por siempre y es México quien debe ver qué hacer para evitar que pasen, porque desafortunadamente algunos se cargan de razón, y ya ha habido casos que se quejan hasta del menú que hacen favor de darles para comer.
Aun cuando no se está de acuerdo con la entrega de recursos tampoco se justifica el sentimiento xenofóbico que algunos grupos fomentan contra estas personas, que se debe reconocer, lo hacen porque tienen una situación muy fuerte no sólo por la cuestión económica, sino también por la inseguridad, ante la presencia de bandas delictivas en esos países como son los Mara Salvatruchas o MS13, pero queda claro que México no es la solución.
BASE DE DATOS…-
En el municipio indígena de Huixtán no se andan con medas tintas, y desde el viernes retuvieron al alcalde, Javier Sebastián Jiménez Santis; al síndico Luis Ton, siete choferes e igual número de vehículos, en la comunidad de San Andrés Rico, todo porque no ha cumplido con la entrega de recursos.
Y es que no ha dado los 12 millones de pesos a los pobladores, por ello la comunidad los vistió de mujer y los hicieron ponerse a botear en la carretera, en tanto, dicen, no cumpla con la promesa de campaña de dar ese dinero a la gente.
Y vaya que al alcalde le va de mal en peor, porque fue interceptado por los pobladores de San Andrés, minutos después de que había sido liberado por la comunidad de San Gregorio, donde estuvo retenido por los mismos motivos, no dar el recurso del Copladem.
Hay que recordar que el recurso del Copladem ha causado graves problemas en los municipios indígenas donde se les entrega el dinero en efectivo para que sea ellos quien decidan qué hacer con él, y por lo regular terminan haciendo nada, es decir no realizan obra y cada año piden lo mismo.
Lo peor que los alcaldes cuando son candidatos lo primero que ofrecen es dar ese dinero en efectivo, sin saber si contarán con él o no y luego sufren las consecuencias, porque son amarrados, secuestrados, heridos tanto ellos como sus familiares, como ha sucedido en El Bosque.***
Por un lado, el FNLS se dice víctima de los policías y por otro lado los empresarios piden la aplicación del Estado de derecho por los desmanes que realiza este Frente sobre todo en la carretera San Cristóbal de Las Casas-Ocosingo, donde mantienen un plantón e incluso este martes organismos de derechos humanos anunciaron, irían a romper el cerco que hay por parte de elementos de seguridad.
Lo que sé es un hecho es que en esa zona se han quemado vehículos de empresas por parte de los del FNLS, incluso mantienen aún retenido a policías, en demanda por la liberación de Javier, uno de sus compañeros acusado de varios delitos.***
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