JAIME CERDIO
La corrupción ha sido, en los últimos años, un tema sensible y de especial relevancia en la agenda pública nacional. No sorprende: el costo político y económico de este fenómeno no sólo impacta en la democracia sino también, mina la confianza de los ciudadanos en las autoridades.
Es por esto que, durante las elecciones del 2018, el combate a la corrupción se constituyó como un elemento esencial del discurso político y por lo tanto, hoy en día resulta indispensable retomar esta agenda y dar continuidad a los esfuerzos derivados de la reforma constitucional anticorrupción.
Chiapas no es ajeno a este sentir nacional y al parecer, los chiapanecos tenemos muy presente este problema en nuestra vida cotidiana. Así lo demuestran datos de la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental que realizó en 2017 el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, donde se señala, entre otros datos, que casi nueve de cada diez (89.8%) chiapanecos considera que la corrupción es frecuente o muy frecuente en el estado.
Ante este escenario, vale recordar que Chiapas tampoco se ha quedado al margen respecto al combate a la corrupción. Pues, de acuerdo con el Semáforo Anticorrupción elaborado por el Instituto Mexicano para la Competitividad, Transparencia Mexicana y la Confederación Patronal de la República Mexicana, el Estado ha cumplido con las correspondientes adecuaciones al marco legal; me refiero a la reforma constitucional y a la ley que regula al Sistema Local Anticorrupción (SLA).
Sin embargo, aún tenemos camino por recorrer, y existen dos puntos a considerar. El primero, surge con la publicación del Presupuesto de Egresos de Chiapas para el ejercicio fiscal 2019, en el cual no se identifican fondos para la conformación del SLA. En este punto, si bien hay que reconocer el esfuerzo de los diputados de la actual legislatura por aprobar un presupuesto que expresa un alto sentido de responsabilidad y de austeridad, no se debe olvidar incorporar la visión del combate a la corrupción. En segundo lugar, es importante comenzar a visualizar las instancias necesarias para la integración del Sistema, como la Comisión de Selección, que sigue pendiente.
Chiapas cuenta con una valiosa oportunidad para hacer frente, y de una vez por todas al fenómeno de la corrupción. Ya tenemos el aparato normativo que nos brinda directrices, ahora debemos seguir por ese camino. Los chiapanecos podemos materializar estos esfuerzos. Será necesario entonces, promover con urgencia, desde el Congreso del estado, y a través de una dinámica de parlamento abierto, la instalación del SLA, así como políticas públicas eficaces. 2019 puede marcar el inicio de una nueva etapa en la historia del combate a la corrupción en Chiapas.
*Jaime Cerdio es economista por el IPN y maestro en Administración Pública y Política Pública por el TEC de Monterrey; cuenta con estudios en la Escuela de Gobierno John F. Kennedy de la Universidad de Harvard. Experto en transparencia y combate a la corrupción. Actualmente, servidor público en el INAI. Síguelo en su cuenta de Twitter: @JaimeCerdio