La mayordomía de las vírgenes de Copoya realizará los días 28, 29 de febrero y 1 de marzo en Tuxtla Gutiérrez el “Carnaval Zoque”, una serie de rituales ceremoniales en cuatro puntos de la capital de Chiapas, lo único que se baila es el baile o danza del carnaval o el baile de la pluma de guacamaya con tres personajes principales, el Te’hatajama etzé, el Napapok-etzé y el Suyuetzé o Viejas de Carnaval.
Danzante de la pluma o Napapok-etzé es uno de los dos personajes principales de la danza, se trata de un varón ataviado como guerrero, con un carcaj o portaflechas, porta un penacho de plumas de guacamaya y pavorreal.
De acuerdo con la iconografía maya la guacamaya está relacionada al astro sol, en la mano derecha lleva una cruz que parece ser un hacha según imágenes relacionadas con códices prehispánicos, y en la mano izquierda lleva su carrizo gemelo o doble con el que marca los cambios de la música.
La vestimenta del danzante es de color rojo y es el color solar por excelencia, también porta un cotopayú, prenda ceremonial que distingue a la autoridades zoques.
Baila los nueve sones que conforman la danza frente a la Alacandú o reinita del Carnaval, personaje asociado a la luna; ambos personajes realizan en la danza el ritual de equilibrio de los astros en el centro de un círculo conformado por las viejas o suyuetzé.
El día más importante de esta danza es el martes de carnaval o vísperas al miércoles de ceniza. El personaje del napapoketzé puede estar relacionado a varios mitos prehispánicos que aluden o hacen referencia a la creación del sol y la luna como es el caso del mito teotihuacano de nanahuatzín o el mito mexica de la batalla entre el sol y la luna o entre huitzilopochtli y coyolxauhqui.
Mientras que las viejas de carnaval o suyuetzé o varones con vestimenta de mujer, son personajes secundarios de la danza, que se visten a la usanza de las mujeres ancianas zoques de Tuxtla Gutiérrez con enredo o naguilla, huipil, rebozo en la cabeza sujetado con un paliacate.
En la mano derecha llevan un bastón o garabato que alude a las ancianas, sinónimo de sabiduría, durante la danza bailan en círculo, de forma contraria a las manecillas del reloj, siempre muy alegres y haciendo bromas a los espectadores, algunas de ellas de índole sexual.
También acostumbran a manchar a la gente con talco o maicena, desde el ámbito ritual, las viejas del carnaval al bailar en círculo son quienes protegen a los personajes centrales el sol y la luna, para que se logre el equilibrio de la danza.
Ellos son la algarabía, el relajo y la distracción de la danza. Sus pasos son cortos y alargados acorde al ritmo del son que se ejecuta, en algunos mitos prehispánicos como el de Huitzilopochtli se mencionan a seres que corren delante de este Dios quien quiere alcanzarlos, los suyuetzé podrían ser dichos seres que en el mito cumplen el papel de estrellas.
La alacandú o reinita baila con traje rojo, similar al antiguo traje de novia zoque y le va ofreciendo el primer olor de las flores de sospó, bailando frente a frente con su gorrito de 4 espejos que posiblemente representa sus cuatro fases y así se realiza una especie de órbita a su alrededor, tal y como ocurre entre el sol y la luna, por lo que la niña reinita – luna le devuelve el reflejo de su luz en su travesía por firmamento y es ella misma quien guía su paso por el inframundo.
En un día saldrá la mayordomía de un punto del lado oriente, otro del poniente, del norte y del sur, visitarán la casa de los priostes, danzarán a las vírgenes y a los santos, recibirán un pequeño bocadillo, agua para rehidratarse y se irán a otro punto, irán por zonas, tendrán libertad de tránsito por las calles y avenidas.
Para el pueblo que no conoce el ritual, la fiesta es monótona, conociéndola es diferente, es la danza de la carne (carnaval) y cuando se abre el cielo se junta con la tierra y vienen los placeres de la carne, pero la cultura zoque tiene que ver con la cuestión del pedimento a la madre tierra para que tengamos buenas cosechas.
Agradeciendo siempre a las vírgenes de la mayordomía zoque de Copoya, Candelaria, del Rosario y Santa Teresa todo lo que se tiene, y que según los mayordomos no tiene que ver con cuestiones paganas, la gente no ha aprendido a darle a la fiesta del Carnaval Zoque el verdadero valor porque no conoce los rituales, la fiesta es de costumbre y de rituales, esa es la esencia, es la belleza.