En este 2022 se crearon las primeras deepfakes modificadas a placer, estos son algoritmos virtuales que crean miles de tomas de la cara que quieren falsificar haciendo como si fuera realmente ella la que está hablando y diciendo las cosas, si bien es cierto es un acto difícil de hacer, cada vez son más populares en la web.
El primer caso se dio en el 2019 cuando una persona realizó un montaje de rostros entre dos personas famosos, situación que fue únicamente para hacer reír sin saber que dicho acto revolucionaría la idea de las deepfakes, la forma de hacerlo es mediante un algoritmo de inteligencia artificial llamado codificador en donde se ejecutan miles de tomas de la cara de las personas que se quieren falsificar posteriormente lo que hace el codificador es identificar y aprender las similitudes entre los rostros y reduce las características comunes compartidas a través de un proceso de comprimir la imagen.
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Es decir, los rostros serán de las personas pero el movimiento de la boca y lo que se dice es de otra más haciendo que el proceso sirva para hacer noticias falsas en su mayoría o bullying entre los más jóvenes quienes son los más afectados en esta situación.
Por ahora esta nueva tecnológica solo puede funcionar en famosos y es que es necesario que existan cantidad ilimitadas de fotos y videos de ellos en la red para que el algoritmo no se equivoque y pueda salir correctamente para hacerlo tan real que solo los mismos personajes puedan identificar si se trata de un deepfake o de un video real.
Por ahora la forma fácil de identificar esta nueva tecnológía es mediante el parpadeo y es que el ser humano parpadea en promedio una vez cada dos a ocho segundos mientras que el deepfake lo hace mucho que menos que una persona normal, además que la mayoría de los montajes es en el rostro por lo cual se presenta una variación en el cuello.
Esto al ser algo nuevo aún no es considerado como falsificación, pero es cuestión de tiempo para que las asociaciones cibernéticas empiecen a ver esto como algo ilícito pues sigue a evolucionar a tal grado que pueda copiar a una persona normal, eso servirá para las aplicaciones de banco y muchísimas cosas más que están controladas por seguridad de rostro.
