2.2 millones sin amparo de las Ciudades Santuario

El Heraldo de Chiapas

  · miércoles 15 de febrero de 2017

*El 36% de los connacionales que viven sin papeles enEstados Unidos lo hace en lugares que no protegen a los inmigrantesy otro 19% vive en “santuarios” localizados en Estadoscontrolados por el Partido Republicano

 

El gobierno de Donald Trump podría deportar a dosmillones de mexicanos que viven ilegalmente en Estados Unidos sinenfrentar resistencia de las llamadas Ciudades Santuario. Y es queellos viven fuera de estas jurisdicciones considera­das amigablespara los inmigrantes.

El Instituto de Políticas Migratorias de EstadosUnidos (MPI, por sus siglas en inglés) estima que ahí viven sinpermiso de residencia 11 millones de personas y de ellas 6.2millones son de origen mexicano.

De este universo de poco más de seis millones deconnacionales, una tercera parte –2.2 millones– habita encondados que no cuentan con políticas de protec­ción ainmigrantes, según una estimación hecha por este medio con baseen los datos del MPI y el listado de Ciudades Santuario publica­dopor el Centro para Estudios de Inmigración (CIS, por sus siglas eninglés).

Ellos podrían convertirse en los primerosrepatriados de una eventual política de deportación masivaordenada desde la Casa Blanca, en caso de que Trump cumpla supromesa de campaña. En palabras del internacionalista JesúsGallegos Olvera, “estos inmigrantes indocumentados sonvulnerables y corren alto riesgo” de ser expulsados.

Los otros 4 millones de mexicanos viven en CiudadesSantuario, que son jurisdicciones que se rehúsan a colaborar conlas agencias federales migratorias en la deportación de residentessin documentos oficiales.

Pero no todos los indocumentados que viven en estos“refugios” gozan de la misma protección. De acuerdo con losdatos, aproximadamente 1.2 millones viven dentro de estadosgobernados por el Partido Republicano, que llevó a Donald Trump alpoder, y sólo 2.8 millones se encuentran en estados gobernados porel Partido Demócrata.

Gallegos, quien también es profesor de la Facultadde Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad NacionalAutónoma de México (UNAM), pide poner especial atención enaquellos estados gobernados por republicanos conservadoresradicales, en donde las Ciudades Santuario corren más riesgo desucumbir. Texas –que tiene la segunda comunidad de mexicanosindocumentados más grande de Estados Unidos– es un claro ejemplode ello.

El gobernador texano, Greg Abbott anunció comoprioridad de su gobierno poner fin a las pocas Ciudades Santuarioque existen en su estado, entre ellas Dallas, Austin y Houston. Eincluso, hay en puerta dos proyectos de ley que pretenden prohibireste tipo de jurisdicciones en todo el estado.

Por otro lado, en el estado de Florida, tambiéngobernado por los republicanos, no se necesitó de ningún cambioen la legislación local para que el condado de Mia­mi-Dade dejarade ser un “santuario” y su alcalde, Carlos Giménez anunciarasu disposición a colaborar con la administración Trump. En estecondado se calcula viven 14 mil connacionales de manera ilegal.