Este viernes 1 de mayo se conmemoró en México el Día del Trabajo, por lo que de acuerdo a la Ley Federal del Trabajo es un día de descanso obligatorio, es un día para recordar la jornada en la que los trabajadores defendieron sus derechos y expresaron sus demandas de una jornada de ocho horas, la indemnización por accidentes laborales, la desaparición del trabajo infantil y descanso dominical.
Sin embargo, este año la conmemoración se celebró de una forma inusual, puesto que llega en medio de la tempestad causada por la crisis de la pandemia del coronavirus y que, en forma excepcional, se estima que en México se perderán más de 3 millones de fuentes de trabajo, así como la reducción de salarios y horas de ocupación.
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El secretario General de la Federación Obrera Revolucionaria del Estado de Chiapas, Teodoro Vázquez Castillo, dio a conocer, que lamentablemente en la entidad decenas de miles de trabajadores y sus familias, tienen una incertidumbre angustiante, pues como nunca antes, viven una situación muy delicada, dada la ausencia de apoyo del gobierno federal y el cierre de empresas por la amenaza de contagio de la enfermedad del coronavirus.
Dijo, que a mitad de la tormenta causada por la pandemia del Covid-19, las estimaciones son catastróficas e incluso el Banco de México augura que la crisis de desempleo será peor que la de 1995, cuando la tasa de desocupación alcanzó 10.7 por ciento, por lo que sin duda aumentará los índices de pobreza en Chiapas, Estado que históricamente ha padecido de esta situación.
Señaló, que de acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en México, 31.3 millones de personas de 15 años y más, ocupadas, se encuentran en el empleo informal, lo que representa 56.2 por ciento de la población ocupada, por lo que será el sector que saldrá más perjudicada por la pandemia del coronavirus.
Es importante contar con esta información acerca de las condiciones laborales en las que está ocupada la población, para medir el impacto que la pandemia del Covid-19 está causando las medidas preventivas, como el cierre de calles, por lo que miles de familias se han quedado sin el sustento diario, abundó.
Para finalizar puntualizó, que lo que viene después del Covid-19 debe preocupar a la sociedad, ya que desafortunadamente el Gobierno de México está ajeno de lo que sienten los trabajadores, debido a que solo invertirá el raquítico porcentaje del 0.3 por ciento de su producto interno bruto para incentivar la economía después de la pandemia; mientras que países como Alemania aplicará el 30 por ciento del PIB, Estados Unidos el 12 por ciento o un país Latinoamericano como Chile destinará el 5 por ciento, por lo que con estas cifras no hay nada prometedor para México.
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