Óscar Octavio Marina Alegría, presidente de la Asociación de Empresarios Chiapanecos de la Industria de la Construcción (ECIC), declaró que el último año del sexenio resultó sumamente negativo para este segmento del sector empresarial.
Mencionó que el retraso de los pagos por los trabajos realizados, así como los recortes presupuestales propiciaron un escenario complicado para la industria de la construcción, lo que los llevó a tomar decisiones lamentables como el despido de trabajadores y en algunos casos, el cierre de empresas.
Denunció que un fenómeno que impactó a los constructores chiapanecos durante este sexenio, es que la obra pública se concentró en pocas empresas, por lo que consideró que se tratan de compañías encabezadas por prestanombres de quienes se encargaron de la adjudicación de los trabajos.
Dijo que el sector empresarial de la construcción esperaba que a finales del sexenio se detonara el tema de la vivienda, ya que se supone que llegaría el recurso para la reconstrucción de los daños que dejó el huracán Stan, y por las afectaciones que dejó el terremoto de septiembre de 2017.
Sin embargo, ocurrió todo lo contrario. La Marina hizo un llamado a las autoridades estatales y federales respecto al flujo de los pagos de las contrataciones, ya que los procesos se volvieron demasiado lentos a partir del terremoto del año pasado, por lo que, hasta la fecha a varios empresarios les deben el producto de su trabajo que ya tienen realizado.
Destacó que los pagos de las estimaciones están completamente desfasadas respecto a los avances de cada obra.
Abundó que con la Secretaría de Obras Públicas y Comunicaciones fue poco el flujo de posibilidades de contrataciones durante el año, en gran medida –reiteró- por el recorte presupuestal que sufrió la dependencia, hablándose de solamente mil 800 millones de pesos para contratar, cifra que incluso no se logró.
De igual forma, en el rubro de infraestructura educativa había una gran expectativa, de que con los recursos federales para la reconstrucción se tendrían varias oportunidades de contratación, pero no fue así, pues no alcanzó para más del 25 por ciento del sector empresarial chiapaneco.
Subrayó que el rezago en materia de infraestructura educativa por la falta de recurso federal, que no ha aterrizado en las arcas del Instituto de la Infraestructura es latente y está presente en muchas escuelas en las que los empresarios iniciaros los trabajos con recursos propios, pero que no pudieron seguir debido a la falta de pago.
Finalmente, hizo un llamado a los gobiernos Federal y Estatal que están por iniciar en diciembre, para que las obras que se contraten para Chiapas se queden en la entidad y no se les entreguen a las empresas foráneas como ha sucedido en los últimos años.