Comunidades de la Selva Lacandona hacen un llamado a la sociedad a no comprar loros y pericos como mascotas, porque se está incentivando el acelerado proceso de extracción de estás especies que cumplen con una función estratégica en la polinización y en la dispersión de semillas para la restauración de los ecosistemas.
A nombre de la Comunidad Zona Lacandona, Adelaida Bolom Gómez, expuso que las poblaciones de estas especies de aves son relevantes en los bosques y selvas, lo que no alcanzamos a dimensionar, por el contrario, se han convertido en el principal objetivo de los saqueadores y ante ello se convoca a la población a presentar denuncia y a la intervención de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente.
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Bolom Gómez pidió hacer frente común entre las localidades de la región para proteger las especies y detener la amenaza de los saqueadores, ambas especies se encuentran en peligro de extinción, no sumarnos a la compra ilegal, además, no las sabemos mantener, siempre que lleguen a un hogar estarán en gran riesgo.
En esta defensa de la especie, las comunidades se han sumado a la tarea de protección de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), uno de los sitios emblemáticos de los loros y pericos es la Reserva de la Biosfera Montes Azules en la Selva Lacandona en los límites con la república de Guatemala.
Bolom Gómez insistió que toda la sociedad debe colaborar con las acciones de prevención y denuncia, lo que el ser humano no puede hacer como la dispersión de semillas en los bosques y selvas lo realizan estás aves para la restauración natural de sus ecosistemas, dijo.
De acuerdo con la ambientalista, los pericos, loros y guacamayas habitan en diversos ecosistemas del país, desde las selvas altas perennifolias del sureste al bosque de pino, encino, en Chiapas en varias Áreas Naturales Protegidas, principalmente en la Selva Lacandona.
