La falta de procuración de justicia impide esclarecer los crímenes contra reporteros, hay un especial interés en hablar de un problema que está grave y delicado, dijo el director general del Programa de Agravios a Periodistas y Defensores de Derechos Humanos de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Rodrigo Santiago Juárez.
Desde la década de los 90 se suscitaban las agresiones, a finales de la misma se desata una mayor, como homicidio y desaparición; y a partir del 2000 se agrava aún más, por lo que se han establecido criterios para la protección a este sector, pero falta acceso a la justicia, relató.
La labor del periodista es tan relevante para la democracia, sin embargo, suman 153 asesinatos desde el 2000; México es el país más peligroso para ejercer esta faena, 21 desaparecidos desde el 2005, el más reciente en Oaxaca, Agustín Silva, enfatizó.
No sólo se trata de la continuidad de los delitos, falla la prevención, seguridad y, de manera severa, la procuración de justicia, aseguró al hablar en la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH), sobre los “Estándares Internacionales de Protección para Periodistas”.
Explicó que, en la nación, la CNDH revisó 176 carpetas de investigación y sólo en el 10 por ciento de defunciones, lesiones y atentados contra medios hay sentencias. En el 90 por ciento hay impunidad, falla la procuración de justicia y se generan casos más alarmantes; en este año, existen doce homicidios a nivel nacional, en vez de que se abate la violencia, ésta ha incrementado.
Sostuvo que no puede haber restricciones directas o indirectas al derecho a la libertad de expresión, la cual no puede ser motivo para acusar penalmente a una persona; el derecho penal nunca debe ser utilizado para afectar la libertad de expresión, nadie debe frenarla. Los señalamientos de la CNDH no han sido suficientes para esclarecer los ataques, atentados, homicidios y desapariciones.
Es bueno que los corresponsales extremen precauciones, pero urge superar el contexto que obliga a tomarlos, ningún comunicador es infalible, puede haber personas ofendidas por un contenido periodístico; no obstante, el derecho penal no es la vía, ni la civil, tampoco puede haber multas tan altas porque afectarían igual a la materia penal, subrayó Santiago Juárez.
La mejor manera de reparar el daño puede ser una vía alternativa como el derecho de réplica, ningún estado de México debe establecer en su código la difamación y calumnia para violar la libertad de expresión; no puede haber discurso de odio o amenazante ni de servidores públicos o particulares, ningún servidor público del nivel que sea, puede pronunciarse en contra del trabajo de la prensa, acentuó el especialista de la CNDH.
Las autoridades responsables de la procuración de justicia no pueden desviar la pesquisa, nadie puede deslegitimar a los medios de comunicación, ni azuzar a actuar en su contra; la situación a nivel nacional es tan delicada, 994 personas tienen medidas de protección, ni los órganos de derechos humanos, logran frenar un escenario complicado “que se nos va de la mano” y tiene que ver con la procuración de justicia e impunidad, sustentó.
El presidente de la CEDH, Juan José Zepeda Bermúdez, expuso que acallar la libertad de expresión ha llegado lamentablemente a la pérdida de vida de alguien, lo que es muy lamentable y la exigencia es de acceso a la justicia y no a la impunidad. Estuvieron presentes la visitadora general de la CEDH, Claudia Ruiz Coutiño y la secretaria Técnica, Laura León Carballo.