(PRIMERA DE DOS PARTES)
Las primeras causas de la deforestación en Chiapasson la ganadería, la agricultura y la cafeticultura, segúnestudios de la organización The Nature Conservancy (TNC) con sedeen Chiapas; la práctica de estas actividades devasta de 30 mil a45 mil hectáreas anuales.
Los procesos clásicos con que se efectúan provocanque miles de hectáreas de suelo y de bosque queden destruidas; porello, la Comisión Nacional de Áreas Protegidas (Conanp) y elInstituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas yPecuarias trabajan en un proyecto de rescate de suelos para laconservación de los bosques en la entidad.
RESCATANDO LASEPULTURA
El biólogo Alejandro Hernández, especialista deTNC, reveló que un claro ejemplo de esto es el trabajo quemantienen en la Biosfera de la Reserva de La Sepultura, donde pormedio de capacitaciones, prácticas de campo y talleresimplementados en las comunidades evitan que se destruyan el bosquecaducifolio de la zona.
“La quema es una práctica utilizada comúnmentepor los agricultores, la cual degrada y compacta el suelo a travésde los años, lo que deriva en deforestación” recalcó.
Asimismo, confirmó que esta era funcional cuando ladensidad poblacional era mínima; sin embargo, los tiemposcambiaron y el productor ahora debe permitir que exista materialorgánico en la tierra para que le sirva de colchón y absorba losnutrientes.
Lo mismo ocurre con la ganadería señaló elexperto, donde campesinos siempre llevan a su ganado a pastar en unárea determinada acabando con las especies de flora que yacen enla zona.
La TNC y la Conanp proponen un método e innovaciónque modifica estas prácticas, al cambiar completamente losestándares, aumentando la producción y disminuyendo el impactoambiental.
[caption id="attachment_253691" align="aligncenter" width="800"]El sistema silvapastoril impulsa a los campesinos a tener unaparcela compuesta de pasto y otros árboles.[/caption]
GANADO DE CÁLIDAD, CONSERVANDOLOS BOSQUES
Por su parte, Héctor Carrillo Martínez, originariodel ejido Ricardo Flores Magón, ubicado dentro de la reserva LaSepultura, recalcó que a través del sistema silvapastorilsensibilizan a pequeños productores para conservar el bosque de lazona.
El sistema silvapastoril promueve que los campesinostengan una parcela compuesta de pasto y otros árboles para consumodel mismo ganado, al evitar así el impacto de la ganadería dentrode estos ecosistemas.
“Mi padre usaba la ganadería de mayor impacto,sólo soltaba el ganado y que se alimentará de los bosques,degradando los suelos y provocando a la larga la deforestación”.Indicó.
La introducción de tal sistema no fue fácil, sesuscitó en el 2009, cuenta don Héctor Carrillo que al principioera un verdadero fracaso porque las vacas no estaban acostumbradasa comer esta clase de alimento, fue hasta los cuatro años quegénero resultados y esto se vio claramente en la producción deleche que de cinco litros diarios paso a 12.
Además el nuevo alimento estimula la producción sinnecesidad de que se le inyecte a la vaca para la ordeña, por loque la producción lechera es más orgánica.
“Nosotros pensábamos anteriormente que las vacasestaban enfermas, se morían o no daban crías hasta dos añosdespués, y era porque estaban desnutridas, ahora eso ha cambiado,dan más leche y tienen en promedio una cría al año”,refirió.
Narra que anteriormente necesitaba 35 vacas paratener resultados económicos, ahora sólo tiene 15 cabezas deganado y ve una mejor producción y lo que más le alegra es que nose daña al medio ambiente.
Asimismo, anteriormente necesitaba hasta 20hectáreas para la práctica ganadera y hoy en día sólo seis,pues las vacas ya no necesitan pastar, si no son alimentadasdirectamente por el productor. “Es un poco más de trabajo paranosotros, pero vemos resultados y estamos contentos”.
Carrillo Martínez es uno de los 12 promotores queempezaron a ver el sistema silvipastoril como una alternativaaliada del medio ambiente, que ayuda a conservar los bosques paraque él, sus hijos y nietos puedan habitar la reserva de LaSepultara en completo equilibrio, sin dañar los ecosistemas.