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La contaminación por residuos tóxicos, entre estos aceite quemado que sale de la zona de máquinas de la presa hidroeléctrica “Malpaso” hacia el río Grijalva, aún afecta a las comunidades cercanas y provoca mortandad de peces, lo que mantiene preocupados a los integrantes de las cooperativas pesqueras que temen por la salud de los habitantes de Mezcalapa.
El vocero de un grupo de pescadores de la región explicó que tras la denuncia de contaminación por aceite y otros residuos químicos, publicada por “El Heraldo de Chiapas” el pasado 27 de enero, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se apresuró a pretender limpiar el área cercana a la cortina “para ocultar” el grave problema que representan los desechos tóxicos arrojados a las aguas del caudaloso afluente en este municipio de la zona Norte.
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PELIGRO PARA COMUNIDADES
Sin embargo, peces como el bagre y la tilapia continúan muriendo, pues en las inmediaciones del sitio como a lo largo de la ribera, miles de peces flotan en el agua, lo que representa un serio peligro para los pobladores de las comunidades Barrio la Jovi, Roberto Barrios y Chintulito, entre otras donde la actividad pesquera se ha visto seriamente afectada.
Señaló que unas 900 familias están alarmadas porque a pesar de los intentos por tratar de dialogar con “los directivos de la presa se han negado y hecho caso omiso al problema de los aceites quemados”.
En varios puntos del lugar, así como en los distintos pasillos, se observa el suelo manchado de negro por los aceites, ropa en medio de charcos amarillentos o cerca de los barandales que dan sobre la parte del río.
Los pescadores acusan directamente a los superintendentes general de Malpaso y de Producción Sergio Mijangos Villatoro de ser “los verdaderos responsables de las grandes afectaciones que estamos pasando en nuestras comunidades, porque la verdad tenemos miedo por la salud de la gente”.
Por último, señaló que continuarán efectuando las solicitudes con la gerencia a fin de sentarse a dialogar para encontrar una solución inmediata al problema de contaminación antes que algo mayor suceda.
900 familias están alarmadas porque no hay respuesta de las autoridades ante la contaminación.
Los pescadores acusan directamente a los superintendentes general de Malpaso y de Producción Sergio Mijangos Villatoro de ser “los verdaderos responsables de las grandes afectaciones.
