San Cristóbal de Las Casas.-María Dolores Sántiz Gómez, emprendedora originaria del municipio de Oxchuc dijo que a través de la venta y exportación de artesanías, mujeres de Oxchuc, buscan independizarse de los usos y costumbres de estar bajo el yugo de los varones, ya que en la actualidad han perdido el miedo de mostrar sus habilidades y tienen ganas de triunfar por méritos propios.
En entrevista, además de contar su historia personal de vida, comentó que cuenta con socio de los Estados Unidos, con quien pretende empoderar a más mujeres de Oxchuc y otros municipios indígenas, para elaborar y exportar artesanías al vecino país del norte y colocar sus productos en el mercado con un valor justo y las artesanas tengan una ganancia y vida digna.
“En estos momentos estamos trabajando el telar de cintura, con corbatas, blusas, vestidos, collares, accesorios, lo que nos identifica como pueblo de Oxchuc; contactamos a un amigo en los Estados Unidos y próximamente vamos a dar a conocer un proyecto grande, para que las tejedoras de telar de cintura de Oxchuc, no se queden casa sumisas, trabajando para ir a las milpas”.
A su opinión las mujeres de su municipio deben buscar mejores oportunidades para conocer otros lugares, por lo que está conformando un equipo para exponer su trabajo a nivel internacional, “de manera personal lo he visto difícil, en mi caso soy casada con dos hijos, pero en el pueblo te dicen rebelde, tóxica, de todo, pero venimos a este mundo para ser grandes personas para desarrollar lo que más sabemos hacer y si sabemos hacer algo, hay que hacerlo con pasión con ganas”.
Y es que salió de su hogar desde temprana edad y es una de las pocas empresarias de Oxchuc que hay en Chiapas, primero estudio la Preparatoria del Estado en San Cristóbal y al culminar sus estudios fue a Tapachula a buscar oportunidades, “empecé a vender ámbar, hubo buen resultado, busqué y comencé a contactar con compañeros de bazares para empezar a promover el ámbar y otros productos”.
Actualmente cuenta con varios negocios en Chiapas, y se ha abierto mercado en Irapuato, México, Puebla, Oaxaca, “en Tapachula y en varios pueblitos de por ahí, ahora que vino la pandemia estoy de regreso en mi pueblo, pero para nuevos proyectos”.
Por último, describió que el proyecto que plantea es llegar a los pueblos originarios con personas que realmente hagan artesanías y la finalidad es obtener un pago justo, pues esperan que cada persona tenga su propio espacio y sea reconocida por lo que saben hacer.