El delegado de la Cruz Roja de Chiapas, Francisco Alvarado Nazar, agradeció a la sociedad la colaboración para la atención médica de los migrantes víctimas del accidente del tráiler el 9 de diciembre en Chiapa de Corzo, 48 en total, el pasado viernes egresaron los últimos 4 menores de edad, que según dijo, su aspiración era volver a reunirse con su familia.
Explicó en conferencia de prensa, que en una primera etapa recibió a 38 pacientes, se redujo a 34 por el traslado que se realizó a quienes necesitaban cirugía, aunque el número de migrantes atendidos creció a un total de 48 víctimas del accidente de tránsito, hubo menores de edad de 15 a 18 años de edad, lo que presentaban era múltiples golpes, fracturas, quemaduras, luxaciones y laceraciones.
Precisó que el sábado 11 se dieron las primeras altas de los migrantes que avanzaron en su recuperación, hubo más de 120 donadores de insumos médicos, alimenticios, en especie y en recursos económicos a la cuenta de la institución, hubo donativos no chiapanecos, hay un volumen de ropa que se enviarán a los albergues donde haya migrantes.
El viernes 17 de diciembre se dio de alta al ultimo grupo de siete personas, cuatro de ellos eran menores de edad, la atención fue posible con la gran colaboración de la sociedad que se sumó a las aportaciones, el Consulado de Guatemala en Tuxtla Gutiérrez constató la calidad de los servicios médicos, muchos tendrán que seguir su rehabilitación, algunos se fueron con extremidades inmovilizadas o con muletas.
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Alvarado Nazar dijo que la enseñanza es que la operación con muchas fuerzas y mucha aportación de la sociedad civil fue posible la atención a los hermanos migrantes de Guatemala, se activaron las delegaciones de San Cristóbal de Las Casas de la Cruz Roja, Cintalapa, Ocozocoautla y Chiapa de Corzo con la delegación estatal de la capital, nunca antes se había tenido un accidente de gran magnitud, este es equivalente a un avionazo, sucesos como Acteal, que han marcado por desgracia al estado.
Ningún migrante quedó sin atención médica, el despliegue fue oportuno, muy bien coordinado, estamos muy expuestos a los accidentes viales y tenemos que apretar más con los reglamentos, tanto en las ciudades como en las carreteras, otra lección aprendida fue la respuesta de la sociedad, durante la emergencia se desplazaron más de 150 voluntarios.
No se dejó de atender el público que normalmente la Cruz Roja atiende, ni dimensionó la sociedad lo que estaba pasando, no se dio cuenta de lo que se estaba viviendo, ninguno de los pacientes se fue con su salud comprometida, el compromiso es mantener la misma entrega y disposición por la atención de las y los hermanos que así lo requieran.