Un ataque armado registrado el fin de semana en el municipio de Altamirano, Chiapas en la región de la Selva Lacandona, dejó como saldo cuatro personas fallecidas, confirmó Gaspar Santiz Jiménez, presidente municipal electo.
Fue la madrugada del sábado cuando hombres armados irrumpieron la cabecera municipal a bordo de tres vehículos tipo Suburban y se dirigieron a las viviendas de los masculinos, donde dispararon en diversas ocasiones y privaron de la libertad a tres de ellos.
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En conferencia de prensa previo a una marcha por la justicia en Altamirano, el alcalde explicó que el día del ataque se llevaron a Jorge J, Carmelo V y Fernando L, los cuales horas más tarde fueron encontrados sin vida cerca de la comunidad Oniljá, mientras que Simeón S recibió varios impactos de bala y tras ser atendido en el hospital perdió la vida.
“Responsabilizamos a Gabriel Montoya Oseguera, el actor intelectual de los hechos ocurridos. Le decimos hoy de que ya no vamos a permitir más atropellos como pueblo y que nos vamos a organizar, pero también le decimos al gobierno y a la Fiscalía de que ponga mano dura para encarcelar a Gabriel Montoya Oseguera”, aseveró el próximo presidente municipal.
Tras la declaración los familiares de las víctimas y los pobladores, llevaron a cabo una marcha pacífica por las principales calles de la localidad, mientras que de manera paralela en los municipios de Palenque, Salto de Agua, Yajalón y Ocosingo, también se sumaron a la exigencia de paz y justicia.
En este contexto de violencia la población afirmó que montaron desde el sábado tres bloqueos carreteros en las entradas y salidas de la cabecera municipal, para evitar el ingreso de grupos delincuenciales vinculados al crimen organizado, por ello atravesaron camiones pesados en la vía de comunicación.
Los habitantes exigieron a las autoridades poner mano dura, de lo contrario “nosotros como pueblo de Altamirano actuará bajo los usos y costumbres”, debido a que la violencia en esa zona del estado sureño del país se agudizado desde el año pasado.
“Hay miedo a que en cualquier momento pueden ser atacados a balazos a cualquier domicilio, porque las organizaciones señaladas (COMACH, PAPICH) están tomando el control de la cabecera municipal de Altamirano”, puntualizó uno de los pobladores.
En marzo de 2023 dos pobladores perdieron la vida cuando el grupo armado denominado 14 de agosto irrumpió una manifestación que los habitantes realizaban en el barrio Casitas por incumplimiento de obras públicas, meses después fueron secuestrados 67 ejidatarios y liberados días después.
En tanto que en mayo de este año, la presidenta concejal, María García y seis funcionales municipales más, fueron privados de su libertad por hombres armados, por lo que la alcaldesa fue liberada 26 días después tras el pago de rescate.
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