/ miércoles 18 de octubre de 2023

Aguas Profundas | Los muertos de Pemex 


La cantidad de muertes ocurridas en accidentes de Pemex en esta administración asciende a 21 y los eventos de alto impacto, reconocidos por la Dirección General, alcanzan los 26. Todo, entre los años de 2019 y 2023. El problema es tan grande que Ángel Cid Munguía, director de Pemex Exploración y Producción de plano puso en marcha un mandato de seguridad y hasta hay un lema: “Trabajar con .seguridad es prioritario para volver a casa”.

El problema es que la razón de fondo del problema es una decisión presidencial, una decisión que escapa a los verdaderos operadores de la empresa. Conseguir la meta de producción a como dé lugar, tomando todos y cada uno de los riesgos que ninguna otra empresa, a nivel mundial, se atreve.

El chiste se llama “Flexibilidad Operativa” y es trabajar al límite. En su pasada comparecencia ante comisiones de la Cámara de Diputados, como parte de la glosa del Quinto Informe de Gobierno, Octavio Romero, director general de Pemex, dijo que el accidente de la plataforma Nohoch-Alfa en julio pasado en la Sonda de Campeche se debió a un trabajo programado en el que hubo fallas humanas tanto de Pemex como de la empresa proveedora, esto de acuerdo a un análisis realizado por la empresa productiva del Estado.

Todo mundo le creyó, pero es en realidad una verdad a medias. En efecto, hay un error humano, de hecho lo hemos comentado aquí, sin embargo, la realidad es que el análisis causa-raíz que se espera con impaciencia es el que va a dar a conocer el Instituto Mexicano del Petróleo (IMP) a la gerencia y dirección de Pemex.

El compromiso del IMP es que este análisis de la causa raíz tentativamente quede listo para finales de este año; aunado a que es la Fiscalía General de la República la única autoridad competente para deslindar responsabilidad por el siniestro.

Lo que no se contó en la comparecencia en la Cámara de Diputados, abonando a la responsabilidad de la petrolera estatal, es la importancia que le están dando en la Sonda de Campeche a la flexibilidad operativa impulsada por Miguel Ángel Miranda Mendoza, subdirector de Seguridad, Salud en el Trabajo y Protección Ambiental (SSTPA) de Pemex.

Esta manera de trabajar implica que una tercera parte de las plataformas de la Sonda de Campeche tienen sus Sistemas de Paro de Emergencia vulnerables, con fallas o sin operar, entre ellos los de Nohoch-Alfa y Abkatún-Alfa, entre otros. Se trata del sistema que actúa de forma automática ante contingencias críticas de la operación para mantener o retornar a los procesos en condiciones seguras, lo que deja vulnerable a toda costa las capas de seguridad de las plataformas que opera Pemex Exploración y Producción en aquella zona.

Buzos

1.-Pemex anunció que redujo el tiempo de inicio de producción de los principales campos a partir de su descubrimiento se redujo de un promedio de ochos años que se registraba anteriormente, a solo uno. Con ese aceleramiento campos como Ixachi, Tupilco o Quesqui, que son actualmente protagonistas del incremento productivo de la petrolera, pudieron incorporar hidrocarburos y gas casi de forma inmediata, con lo que hoy, son esos nuevos desarrollos los que aportan casi una tercera parte de la producción total de la empresa estatal y siguen ganando terreno en tanto luchan contra la declinación de campos maduros.


La cantidad de muertes ocurridas en accidentes de Pemex en esta administración asciende a 21 y los eventos de alto impacto, reconocidos por la Dirección General, alcanzan los 26. Todo, entre los años de 2019 y 2023. El problema es tan grande que Ángel Cid Munguía, director de Pemex Exploración y Producción de plano puso en marcha un mandato de seguridad y hasta hay un lema: “Trabajar con .seguridad es prioritario para volver a casa”.

El problema es que la razón de fondo del problema es una decisión presidencial, una decisión que escapa a los verdaderos operadores de la empresa. Conseguir la meta de producción a como dé lugar, tomando todos y cada uno de los riesgos que ninguna otra empresa, a nivel mundial, se atreve.

El chiste se llama “Flexibilidad Operativa” y es trabajar al límite. En su pasada comparecencia ante comisiones de la Cámara de Diputados, como parte de la glosa del Quinto Informe de Gobierno, Octavio Romero, director general de Pemex, dijo que el accidente de la plataforma Nohoch-Alfa en julio pasado en la Sonda de Campeche se debió a un trabajo programado en el que hubo fallas humanas tanto de Pemex como de la empresa proveedora, esto de acuerdo a un análisis realizado por la empresa productiva del Estado.

Todo mundo le creyó, pero es en realidad una verdad a medias. En efecto, hay un error humano, de hecho lo hemos comentado aquí, sin embargo, la realidad es que el análisis causa-raíz que se espera con impaciencia es el que va a dar a conocer el Instituto Mexicano del Petróleo (IMP) a la gerencia y dirección de Pemex.

El compromiso del IMP es que este análisis de la causa raíz tentativamente quede listo para finales de este año; aunado a que es la Fiscalía General de la República la única autoridad competente para deslindar responsabilidad por el siniestro.

Lo que no se contó en la comparecencia en la Cámara de Diputados, abonando a la responsabilidad de la petrolera estatal, es la importancia que le están dando en la Sonda de Campeche a la flexibilidad operativa impulsada por Miguel Ángel Miranda Mendoza, subdirector de Seguridad, Salud en el Trabajo y Protección Ambiental (SSTPA) de Pemex.

Esta manera de trabajar implica que una tercera parte de las plataformas de la Sonda de Campeche tienen sus Sistemas de Paro de Emergencia vulnerables, con fallas o sin operar, entre ellos los de Nohoch-Alfa y Abkatún-Alfa, entre otros. Se trata del sistema que actúa de forma automática ante contingencias críticas de la operación para mantener o retornar a los procesos en condiciones seguras, lo que deja vulnerable a toda costa las capas de seguridad de las plataformas que opera Pemex Exploración y Producción en aquella zona.

Buzos

1.-Pemex anunció que redujo el tiempo de inicio de producción de los principales campos a partir de su descubrimiento se redujo de un promedio de ochos años que se registraba anteriormente, a solo uno. Con ese aceleramiento campos como Ixachi, Tupilco o Quesqui, que son actualmente protagonistas del incremento productivo de la petrolera, pudieron incorporar hidrocarburos y gas casi de forma inmediata, con lo que hoy, son esos nuevos desarrollos los que aportan casi una tercera parte de la producción total de la empresa estatal y siguen ganando terreno en tanto luchan contra la declinación de campos maduros.