Tuxtla Gutiérrez.- La cruz congregó a miles, la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe recibió a familias completas, casi todos cargando una, esperaban la bendición, la mayoría la colocaría en la parte más alta de su casa, en el altar de su hogar, en el panteón donde descansan sus seres queridos y para festejar la construcción en este llamado también día del albañil.
Uno a uno fueron llegando a la parroquia en el centro de Tuxtla Gutiérrez, eran recibidos por los sacerdotes mientras el coro entonaba alabanza recordando el misterio de la cruz de Jesucristo el hijo de Dios, la comunidad católica atenta a la liturgia.
El sentido de la bendición, elevar una súplica a aquel que tiene la excelencia absoluta, es decir, a Dios que comunica su excelencia a sus creaturas, por ello la mayoría de las 74 parroquias de la Diócesis de Tuxtla, celebra este acontecimiento.
Para los cristianos católicos la Cruz representa un resumen en el que aparece el misterio del hombre y la redención que Dios le ofrece; el amor y la entrega generosa.
La Cruz aparece para los discípulos como la revelación de la Gloria de Dios que exige la contemplación. El cuerpo de Jesús reina de verdad en el trono de la cruz. Revela como es Dios, qué es lo que significa el hombre a los ojos de Dios y hasta dónde puede llegar Dios en su búsqueda del hombre.
Otra parroquia en la que se realizó una ceremonia de bendición de la Cruz es santa Cruz en Terán y Nuestra Señora de Candelaria en Copoya, en la capilla de la Santa Cruz, para mostrar al mundo el carácter central y esencial para el misterio de la redención.
La familia Popomeyá, expuso que “nos referimos en la Parroquia de Guadalupe para recibir la bendición de la cruz y entorno a la misma cruz de Jesús, aquella en la cual fue clavado”.
Explica que cuando en una casa se coloca la cruz es un signo de pertenencia a la Iglesia Católica, de reconocimiento a un Dios que entregó a su hijo en la Cruz para salvar a la humanidad.
En la comunidad católica prevalece esta tradición de bendición de la cruz, en algunas parroquias desde las siete de la mañana hubo celebración eucarística, a la que albañiles llevaron su cruz para recibir la bendición, luego celebrar convivios en su centro de trabajo.