En medio de una creciente ola de violencia en el municipio de Pantelhó, más de 100 mujeres, acompañadas de sus hijos, han salido a denunciar las continuas agresiones perpetradas por grupos civiles armados en la región. La situación alcanzó un nuevo nivel de gravedad recientemente con una emboscada en la que los habitantes de la comunidad de San José Tercero fueron atacados por individuos armados provenientes del poblado de Fracción Tzanenbolom.
Durante varios minutos, la balacera sumió a la comunidad en el miedo y la incertidumbre. Las mujeres, provenientes del poblado afectado, se han unido para exigir a los gobiernos federal y estatal que establezcan el estado de derecho en la zona, ya que las agresiones se han vuelto constantes, generando un clima de inseguridad que ha paralizado las actividades cotidianas de la población.
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El grupo de mujeres, visiblemente consternado y temeroso, expresó su preocupación por la falta de seguridad en el municipio, destacando que tanto ellas como los hombres se ven imposibilitados para salir a trabajar en sus milpas y cafetales. El temor a ser emboscados o asesinados por los grupos armados ha paralizado la vida diaria de la comunidad.
"Por favor, gobiernos, les pedimos que nos ayuden y que se restablezca la paz en el municipio. Nosotras, como mujeres, no podemos salir a sembrar o limpiar nuestro cafetal. También los hombres no pueden ir a trabajar en las milpas porque tienen miedo de ser emboscados o asesinados", expresó una de las mujeres en su lengua materna.
Las mujeres solicitan la intervención urgente de las autoridades para detener a los responsables de estas agresiones y restablecer el orden en el municipio. La comunidad denuncia sentirse hostigada, amenazada y acorralada, con el constante miedo de ser retenidas o asesinadas por estos grupos civiles armados.
Desde Pantelhó, ubicado en la región de los Altos de Chiapas, el grupo de mujeres hace un llamado respetuoso pero firme a las autoridades para poner fin a la situación de desorden que afecta a la localidad. La población responsabiliza a los habitantes de la comunidad de Fracción Ztanembolón por la violencia, instando a las autoridades a aplicar el estado de derecho y enviar soldados para detener a los responsables antes de que la situación se agrave aún más.