Como cada 28 de diciembre se celebra el Día de los Santos Inocentes, un día donde la población generalmente se dedica a realizar bromas o sorpresas entre amigos o también en la familia, incluso hasta en los centros de trabajo como algunos medios de comunicación.
Pablo César, habitante de la capital chiapaneca, manifiesta que tanto en su núcleo familiar y como social no se acostumbra a celebrar el día de los Santos Inocentes, “únicamente se yo por las bromas que comúnmente hacen las personas”.
También puedes leer: "Día de los Inocentes", cuándo y por qué se celebra
Para Valeria Franco, el 28 de diciembre es un día normal, únicamente sabe que es una fecha cercana a los festejos de Año Nuevo, por ello asegura que tampoco suele celebrar, ya que no se le hizo una tradición y su familia no se le inculcó.
“Entonces no he sido casi de celebrar…La verdad desconozco, no tengo conocimiento del por qué se celebra”.
A diferencia de Pablo y Valeria, Gustavo un joven de aproximadamente 30 años, menciona que sus familiares y amigos sí acostumbran a realizar bromas en el Día de los Santos Inocentes, por ello, los 28 de diciembre no prestan ni dinero y muchos menos objetos de valor.
En cuanto a la historia de esta celebración, detalló que “Por lo que sé es que esta celebración se lleva a cabo porque en aquel entonces un Rey según mando a matar, una matanza exhaustiva con los niños en busca de Jesucristo, entonces a partir de esto se empezaron a esconder a los niños y por eso se le conoce como el Día de los Santos Inocentes”.
De acuerdo con la iglesia católica, la historia de este día está marcada por una acción de lo más cruel, es decir, en el episodio hagiográfico que narra la matanza de todos los niños nacidos en Belén, Judea, menores de dos años, que fue ordenada por Herodes I “El Grande” para deshacerse del Jesús de Nazaret.
El nombre de “Santos Inocentes” viene de que a una edad tan temprana (2 años) no podían haber cometido pecado alguno. A lo largo de la historia, la celebración fue cambiando y los monaguillos comenzaron a gastar bromas en este día. Costumbre que pasó después a las familias.