Accidentes en motocicletas aumentan 80% durante esta temporada

El 10 por ciento son víctimas mortales y el resto presenta traumatismos craneoencefálicos, daños cerebrales irreparables, fracturas o comas

Selene Álvarez

  · jueves 3 de enero de 2019

Los accidentes que se registran más en esta época son los de motocicletas, los cuales aumentan hasta 80 por ciento en comparación con los meses anteriores.

En este sentido, Emir Medina Chiu, médico general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), refirió que una de las causas de estos percances es la falta de precaución y protección, así como combinar el alcohol y la velocidad.

Señaló que de dicha cifra, el 10 por ciento son víctimas mortales y el resto presenta traumatismos craneoencefálicos, daños cerebrales irreparables, fracturas o comas, y por estas situaciones los parientes llegan a gastar hasta 15 mil pesos por las atenciones primarias sin contar los gastos por rehabilitación.

“En la mayoría de los casos los hombres son quienes se accidentan por manejo imprudencial y muchas veces es porque están bajo los efectos del alcohol, así que los perjuicios son irreparables en cuanto a la salud de la víctima y de igual manera para la familia”, detalló.

Especificó que los individuos de 16 a 40 años de edad ocasionan este tipo de incidentes, por actitudes imprudentes y por ello el llamado a usar las protecciones adecuadas y no conducir en estado de ebriedad.

“El uso del casco evita golpes y heridas en la cabeza que pueden ser devastadoras o incluso dejar con alguna incapacidad, el uso del mismo reduce en 85 por ciento las lesiones graves, además de que disminuye en 75 por ciento la posibilidad de morir”, puntualizó.



10 recomendaciones para los motociclistas

Conduzca siempre con precaución, porque la motocicleta es un vehículo sin una carrocería que ofrezca mayor protección a su conductor.

Recuerde que el límite de velocidad urbano es 60 kilómetros por hora, a menos que se especifique distinto.

No lleve más personas como pasajeros que aquellas para las que el vehículo fue diseñado, ni más carga que aquella que le permita tener ambas manos en el manubrio y que no desestabilice el vehículo.

Conduzca en línea recta, sin eses que invitan a una colisión con un vehículo cercano, y no se ubique en el punto ciego del mismo (la zona detrás del automóvil que no es cubierta por sus espejos retrovisores).

No se abra innecesariamente para virar en los cruces.

Trate de prever las condiciones del camino con anticipación, como pavimento mojado, hojas caídas, etc., que le permitan tomar las medidas adecuadas.

Reduzca la velocidad al transitar cerca de escuelas, plazas y, en general, zonas donde niños puedan bajar repentinamente a la calzada.



Reduzca la velocidad al acercarse a transportes escolares o vehículos de la locomoción colectiva que se hayan detenido para tomar o dejar pasajeros.

No conduzca si ha ingerido alcohol, o si sus condiciones físicas y psíquicas no son las óptimas.

Esté siempre atento a situaciones inesperadas, como derrames de combustibles, cruce de animales domésticos, etcétera.