El Administrador Apostólico de la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez, monseñor Rodrigo Aguilar Martínez, hizo un llamado a orar por la paz de Chiapas, a desplegar un esfuerzo misionero de sacerdotes, religiosas y laicos martirial, de entrega en el servicio a las comunidades, para evitar el daño de aquellos que se creen dueños de la vida, celebremos con el amor de Jesús y hagamos el bien a todos y todas desde nuestro ministerio, con vocación desde el matrimonio, desde el sacerdocio, desde el servicio de las religiosas.
"Oremos por los que provocan violencia de sangre para que recapaciten, reorienten su vida, y ello implica un testimonio martirial de nuestra parte, Jesús mismo tuvo miedo y angustia de muerte y le duplica a Dios padre, aparta de mi este cáliz, pero no se haga mi voluntad sino la tuya, de modo que dispongámonos a ese testimonio martirial, si no con el derramamiento de sangre hasta la muerte, si en ese desprendimiento en qué parece ser que los grupos muy organizados creen los dueños de la vida en las comunidades, nosotros sigamos orando al señor y siendo testimonio de Jesucristo y su misterio pascual que nos da vida".
En celebración eucaristía solemne celebrada en la Catedral Metropolitana de San Marcos, la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez presidida por monseñor Rodrigo Aguilar Martínez, Administrador Apostólico, reunida con sus 76 parroquias provenientes de 44 municipios de Chiapas, bendice los santos óleos para ser enviados a cada uno de estos territorios.
El Santo Crisma se impone en el Bautismo, en la Confirmación y en la Ordenación, invita a los cristianos a participar en la misión de Jesucristo en la plenitud del Espíritu Santo, el óleo de los enfermos se utiliza para impartir el sacramento de la unción de los enfermos, se puede recibir más de una vez en la vida, a la misa crismal asistieron sacerdotes, religiosas, religiosos, laicos y laicas.
Monseñor Aguilar Martínez, Obispo de la Diócesis de San Cristóbal de las Casas, hizo un llamado a los fieles a asumirlas tareas de Jesús para propagar el evangelio de amor, de paz y de reconciliación, por ello vale la pena dar gloria a Dios en el cielo y en la tierra paz a los hombres que ama.
Dijo que es de gran importancia renovar el amor en Jesús, todas las iglesias y los templos son morada de Dios, así como el son de la fraternidad que nos ha sostenido, porque Jesús no deja de amarnos, de llamarnos y de enviarnos para hablar y actuar en su nombre, lo que implica desaparecer imagen de prepotencia y cultivar imagen de humildad con una fiel entrega a sus comunidades.
En presencia del Arzobispo Emérito de Acapulco Guerrero y segundo obispo de Tuxtla Gutiérrez, monseñor Felipe Aguirre Francisco; el obispo auxiliar, José Luis Mendoza Corzo y del Administrador Apostólico, Rodrigo Aguilar, el presbiterio, en total 160 sacerdotes, renovaron su compromiso sacerdotal con la Iglesia Católica y su misión.
Laicos hombres y mujeres fueron delegados de las 76 parroquias y los responsables de llevar a sus territorios los santos óleos, por la tarde este mismo día celebrarán misa de recepción e intronizacion de los aceites sagrados cada una de las parroquias distribuidas en 44 municipios.
La bendición de los aceites sagrados por parte de la Iglesia Católica se realiza una vez al año durante la Semana Santa, siempre presidida por el obispo, para los que van a ser bautizados, confirmados, ordenados sacerdotes y para la sanación de los enfermos.
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