El más grande reto de las instituciones públicas en Chiapas es que la ciudadanía recobre la confianza en ellas, más aún en las autoridades electorales que son los árbitros que deben de llevar a buen fin las elecciones, dijo la presidenta del Instituto de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales del Estado de Chapas, Ana Elisa López Coello.
El proceso electoral local iniciará el 15 de enero del 2021 para las elecciones del 6 de junio, y el llamado desde ahora es a garantizar a la ciudadanía el acceso a la información de las actas de escrutinio y cómputo que realizarán todas las mesas directivas de casillas mismas que son digitalizadas por los órganos desconcentrados del IEPC.
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Durante una videoconferencia con consejeras y consejeros del Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana, enfatizó que en la medida en que la ciudadanía tenga la información plena del total de los sufragios y el destino de estos, será posible superar la desconfianza, porque esta persiste a pesar de todas las reformas electorales realizadas y las que seguramente se van a efectuar.
La información pública en manos de la ciudadanía tiene que coadyuvar a la formación de estructuras democráticas y con ello, a ciudadanos participativos, mientras la ciudadanía no participe tampoco se puede dar el acceso a la información, enfatizó.
Sostuvo que es indispensable la transparencia en las instituciones públicas para recuperar la credibilidad de la sociedad y para el fortalecimiento de la democracia, pero es a la vez, muy necesaria la verdadera participación cívica, como el que se ponga a disposición del pueblo la información sobre los recursos públicos que se están utilizando en los procesos electorales.
López Coello mencionó que cuando la ciudadanía es tomada en cuenta es participativa, cuando lo se le toma en cuenta no participa como una forma de rebeldía ante los malos manejos de los recursos públicos, el abstencionismo es resultado de la desconfianza de que su voto no será utilizado legalmente.
En Chiapas aún se presentan viejas prácticas de compra y coacción del voto, quema de casillas, sustracción de urnas y quema de edificios públicos de órganos desconcentrados electorales para no tener una claridad cierta de que los votos están siendo respetados.
A pesar de las reformas electorales aún existe desconfianza en los procesos electorales, seguramente habrá más modificaciones a las leyes y persistirá la desconfianza, por un lado, de actores políticos y por otro, de ciudadanos que creen que su voto no cuenta.
La ciudadanía debe tener acceso a la información pública de todos los sectores de los gobiernos, lamentablemente no hay esa cultura cuando en el fondo debería abonar al ejercicio transparente y a la rendición de cuentas de los gobiernos, añadió López Coello.
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