El director regional de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), Adrián Méndez Barrera, afirmó que habrá un freno urbano en el Parque Nacional “Cañón del Sumidero”, y si bien se pretende desincorporar 91 colonias asentadas antes del decreto presidencial del 8 de diciembre de 1980, que crea esa zona sujeta a conservación, muchas van a tener que salir.
Explicó que durante el 2016 y 2017 se efectuó una consulta para el rescate del parque, una superficie de dos mil 900 hectáreas, el proceso está en marcha y sólo depende de la modificación del decreto presidencial por parte del Ejecutivo federal para dejar fuera estos asentamientos humanos y crecer el área natural protegida hacia Villa Allende, para recuperar el conector biológico.
“Todas las colonias que se van a desincorporar serán incorporadas a un proceso de restauración del ecosistema, para hacer frente al cambio climático, la gente que se quede en el lugar no va a poder hacer lo que quiera, va a tener que sumarse a la conservación y a cambiar su estilo de vida a favor de los recursos naturales”, apuntó.
Méndez Barrera, aseguró que las personas que van a salir lo saben, no hay engaños, ni falsas expectativas, porque se ha elaborado un estudio técnico justificativo, estableciendo con claridad los límites del sitio con los de las colonias de Tuxtla Gutiérrez y Chiapa de Corzo.
“Algunas han entrado recientemente y han pensado que, si es posible desincorporar a 91 colonias, que sean otras más, pero abusaron desde el 2012, y no se van a permitir nuevos asentamientos humanos en esa área, si alguna institución ha proporcionado papeles a los que han sido desalojados, no es responsabilidad de la Conanp, aclaró.
Que hayan presentado credencial de elector expedida por el Instituto Nacional Electoral no es una causal de manipulación o engaño, el documento es de identidad y para ejercer el derecho al voto, no tiene relación con la propiedad o la tenencia de la tierra, el tema de orden y de Estado de derecho es otro asunto, lo que queda claro es que quienes vivían y viven ahí no son dueños, ni posesionarios de nada”, enfatizó.
Exhibió el escrito de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para que se garantice la integridad del parque nacional; “los operativos de desalojo tienen que ver con el acatamiento de esa recomendación, estamos respetando los derechos humanos porque en ese sitio las familias no tienen futuro”, aclaró.
“En las 91 colonias que serán desincorporadas es irreversible el daño ambiental, ya tienen calles, varios servicios, el compromiso es recuperar lo que es posible y restaurar el ecosistema”, puntualizó.