La comunidad Lacanjá Chansayab municipio de Ocosingo, a través del líder lacandón, Pablo Chankin, oferta a la comunidad turística nacional e internacional el "Santuario de los Cocodrilos: Tres Lagunas", un atractivo que muestra al mundo la riqueza natural y el esfuerzo de los habitantes por conservar esta especie en peligro de extinción y su reproducción.
Artesanas y artesanos de la cabecera municipal obsequiaron a Chankin playeras bordadas a mano y pintadas promocionando el Santuario del Cocodrilo, para obtener recursos económicos que les permita continuar con el trabajo de conservación de la especie emblemática de la Selva Lacandona.
Pablo Chankin aclara que los lacandones no solamente se dedican a cuidar y conservar a los cocodrilos, sino también a otras especies como el jaguar, el tapir, el puma, ocelote y jaguarundi, los cinco felinos con que cuentan en el Santuario Tres Lagunas, también monitorean las especies para conocer la dimensión de su población, su estado de salud.
Cuenta que para los lacandones existe una relación directa entre el ser humano y la naturaleza, por ello, cada que se pierde un árbol llora la humanidad, cada que muere una especie de fauna el hombre está en peligro, de ahí la importancia de la conservación y el cuidado de la madre tierra.
También se conserva el venado, el tepezcuintle, el mono aullador, entre otras especies, esa es la principal enseñanza de la cultura maya lacandona, de la condición en que se encuentren los bosques y selvas depende la calidad de vida de la fauna, pero también de la biodiversidad depende el bienestar de la humanidad a través de los servicios ecosistémicos que recibe.
Pidió apoyo a la comunidad local, nacional e internacional para seguir cuidando la riqueza natural de la Selva Lacandona, un gran territorio que colinda con Guatemala, pero que presenta problemas que lo debemos resolver entre todos, como la pérdida de la cubierta forestal, las ocupaciones para cambio de uso del suelo, los incendios forestales, la caza furtiva, la contaminación por el uso de agroquímicos por parte de diversas comunidades que ha disminuido las poblaciones de abejas.
"Los cazadores se introducen a la selva, matan a la mamá y dejan a la cría, lo utilizan para su comercialización, ya sea la piel o la carne, lo que nos preocupa porque las especies que reproducimos se encuentran en peligro de extinción".
Dijo que debido a la pandemia del SARS Cov2 (Covid 19) el turismo no ya llegado desde febrero del año pasado al Santuario del Cocodrilo Tres Lagunas, lo seguimos promoviendo para que tengamos la posibilidad de captar ingresos, a la vez, será posible cuidar los recursos naturales que encuentran medido de reproducción a través de la polinización que realizan las abejas, pero que hoy no ha sido posible.
La comunidad lacandona habita en Lacanjá Chansayab, un 90 por ciento vive del ecoturismo, también se producen artesanías, se proporciona el servicio de taxi, descenso en ríos, y otras sin embargo, es posible realizar un recorrido majestuoso por la Selva Lacandona.
Llegar a Lacanjá Chansayab es admirar el trabajo de los hombres y mujeres por la conservación del medio ambiente, pero también la riqueza cultural a través de la Zona Arqueológica Yaxchilán, Bonampak, Plan de Ayutla y la grandeza de otros atractivos como el Campamento Turístico de la Comunidad Zona Lacandona, habitada por aproximadamente 700 lacandones mayas.
