Ciudad de México.- Vale la pena exhortar a laslegislaturas locales en el país para armonizar sus constitucionesen materia de derechos humanos, a fin de defender la dignidadhumana y su pleno ejercicio, ya que existen estados que no hanlogrado la conjunción de sus cartas máximas con la reforma alartículo 1 Constitucional, publicada el 10 de junio de 2011,informó el diputado federal por el estado de Chiapas, EmilioSalazar Farías.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (DH) enel reporte “Plataforma de Seguimiento a la ArmonizaciónNormativa de los Derechos Humanos”, revela que únicamente 11 delas 32 entidades federativas (34 por ciento del total) cumplen conel 100 por ciento de la armonización. En el punto de acuerdo, quese presentó en la Permanente y analiza la Primera Comisión,después de seis años de esa reforma, estados como Sonora,Chihuahua, Chiapas, Ciudad de México y Morelos, oscilan en unporcentaje de avance entre 27 y 63 por ciento.
La armonización y sistematización de lasConstituciones en las entidades federativas es un imperativo parafortalecer los parámetros y estándares institucionales, dado queambas son condiciones del funcionamiento del federalismo. Aunado aello, modificaciones relativas a los derechos humanos, como lareforma del 10 de junio de 2011, demandan que sean cumplidas paraavalar, mediante el Estado de derecho, el ejercicio de dignidadhumana en México.
El presidente de la Comisión de Desarrollo Municipalen el Congreso de la Unión, dijo que es fundamental exhortar a lospoderes legislativos locales, a fin de dar cabal cumplimiento a losprincipios que defienden los derechos relativos a la dignidadhumana y su pleno ejercicio, sin mencionar que la armonización delas constituciones estatales también supone el fortalecimiento delsistema jurídico mexicano y la interconexión normativa de un todocoherente.
Para finalizar, Salazar Farías recordó que dichareforma cambia el paradigma del ejercicio de los derechos humanosen la nación, donde las autoridades y entes estatales adquieren laobligación no sólo de asegurar, sino de promover y robustecer elesquema de garantías, atendiendo principios como la progresividady la interdependencia, mecanismos eficaces para su aplicación yprotección.