Comercios, mercados y supermercados de Tuxtla Gutiérrez, se visten de color blanco, naranja, morado y negro por la celebración del Día de Muertos, una tradición mexicana que sirve para recordar a familiares y amigos que se adelantaron en el camino.
Bety Juárez, quien se dedica a la venta de disfraces desde hace más de 20 años, nos cuenta que para este año la temática de las máscaras no está definida, la población está adquiriendo de todo, aunque el año pasado las más solicitada pasado fue la de la serie Juego del Calamar.
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En cuanto a los disfraces, dice que los más requeridos son los clásicos de calavera, chucky, bruja, Merlina y payaso, aunque conformen se acerque el Halloween y el Día de Muertos, la temática se irá definiendo.
En cuanto a los costos de las máscaras oscilan entre los 75 y 340 pesos. Mientras que en los disfraces los precios van desde 400 hasta 600 pesos. Por ello, prevén las ventas repunten en próximas semanas y ayude a reactivar la economía local.
“Eso esperamos, como ya hay escuelas ya hay un poquito más de venta, eso nos va ayudar fantástico a todos los que vendemos esto”.
Por su parte, Carmen Hernández, quien tiene su local de adornos en el Mercado Juan Sabines de Tuxtla Gutiérrez, explica que los productos de mayor venta hasta el momento es el papel picado, las guirnaldas, tiras de papel, los adornos de pared y las guías de nailo.
Los precios de los artículos de adorno van desde los 5 hasta los 200 pesos, todo depende del material. Por ello, asegura que en próximas semanas esperan un repunte de sus ventas, ya que por la pandemia del COVID-19, resultaron afectados.
“Gracias a Dios se está vendiendo, pero todavía está lento porque está empezando la temporada, falta lo mero bueno”.
Cabe destacar que a estos productos de temporada, se suman las frutas tradicionales como la mandarina, caña, calabaza y dulces hechos a base de azúcar, los cuales no pueden faltar en los altares.
