Una de las estrategias que se está aplicando en los nuevos gobiernos, federal, estatales y municipales, consiste en el ahorro. No hay garantía de que dará los resultados esperados porque tampoco se puede apretar demasiado al gasto público; sin embargo, es la línea de la 4T y quienes están trepados en ese barco, tienen que apretarse el cinturón.
Además, una cosa sí es cierta, los gobiernos anteriores habían caído en el dispendio y en la parafernalia, a carretadas. Y la gente se cansó y lo demostró en las urnas.
APRETÓN DE CINTURÓN EN TUXTLA
Este martes, en Tuxtla Gutiérrez, por ejemplo, el Ayuntamiento anunció un logro importante que se tenía que cacaraquear: terminó de pagar una deuda de corto plazo contraída a principios de la administración de Carlos Morales Vázquez porque no les dejaron ni para aguinaldos, en el DIF y en el SMAPA, por citar un caso.
Aunado a ello, la estrategia del ahorro, el gasto efectivo y sin caer en ostentosidades como sucedía en el pasado reciente, permitió que la deuda total del municipio se redujera en más de 400 millones de pesos.
El tesorero, Carlos Gorrosino Hernández, como todos los tesoreros intentan, ha logrado “estirar” los pesos y sacar del “agujero” a la administración coneja.
La deuda total era, explicó en rueda de prensa, de 925 millones de pesos al 30 de septiembre del año pasado y actualmente es de 524 millones de pesos.
Dijo que han aplicado estrategias para mejorar la recaudación, para ahorrar en uso de vehículos, asesores y en gastos innecesarios, así como poner, “con la pena”, de patitas en la calle a quienes simplemente no llegaban a trabajar, aviadores, para que nos entienda.
Pretende, el ayuntamiento tuxtleco, que las prisas no le vuelvan a ganar y que no haya necesidad de recurrir a nuevos endeudamientos.
No podemos regatearle ese pase “de taquito” al Tesorero del ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez y el gol anotado por el presidente municipal, Carlos Morales.
NO TODO ES PELADITO Y EN LA BOCA
El viernes anterior tuvimos la oportunidad de entrevistar al secretario de Seguridad y Tránsito Municipal, Jorge Alexis Zuart Córdova, a quien tundieron en redes sociales por un lamentable asalto semanas atrás al Poniente de la capital del estado.
Lo dijimos entonces, es obvio que la sociedad reaccione así, pero también es importante que si queremos mejorar los indicadores de seguridad, participemos todos.
Por ejemplo, tras el lamentable asalto que derivó en la muerte del conductor del vehículo, surgió la propuesta de endurecer el control del uso de motocicletas en Tuxtla Gutiérrez.
La idea es que los motociclistas, además de portar sus papeles en regla y el casco, porten un chaleco “fluorescente” en el que sea visible el número de las placas de la unidad.
Así, en caso de un atraco o cualquier ilícito, mediante las cámaras de seguridad o la denuncia ciudadana, sería más fácil identificar a los agresores.
La reacción vino en “redes sociales”, de acuerdo con la propia versión del titular de Seguridad Municipal. Voces sociales indicaron que se trata de una medida coercitiva que atenta incluso contra los derechos humanos.
Por supuesto que no se atenta contra las garantías individuales. Por supuesto que puede resultar incómodo y engorroso otra medida más. Pero por supuesto que es una forma de hacer frente a la delincuencia.
A pesar de que la medida continúa en análisis, incluso se organizaron foros para escuchar los pros y los contras, queda claro que cuando exigimos también tenemos que dar. No todo es peladito y en la boca.
NO SE PUEDE DAR GUSTO A TODOS
Días atrás contábamos que en Morelia hubo molestia de la población porque la Guardia Nacional está revisando hasta “los bolsos” de las señoras en el transporte público.
Este martes en la noche, un video presuntamente grabado en Ocosingo fue compartido en redes sociales y personas encapuchadas rechazan la presencia de la nueva corporación porque “está deteniendo a compañeros”. La pregunta es: ¿entonces qué hacemos, le damos gusto a todos?
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