En las plazas de Tuxtla Gutiérrez, la capital del estado de Chiapas, una mujer indígena tsotsil llamada Lucía Gómez Gómez se destaca por su trabajo artesanal y su compromiso con la tradición textil de su pueblo, San Juan Chamula. Lucía, acompañada por cuatro de sus hijos, se dedica a la elaboración y venta de blusas con bordados de colores patrios durante el mes de septiembre, en conmemoración de las fiestas patrias.
Lucía, de origen tsotsil, trabaja incansablemente durante el día para confeccionar dos de estas hermosas blusas, pero ofrece tres al público por un valor de 100 pesos cada una. Esta dedicación a su oficio es impulsada por su pasión y su deseo de compartir la cultura y la tradición de su comunidad con los habitantes de la capital chiapaneca.
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La prenda emblemática que Lucía elabora se conoce como "Tortuga". Esta blusa presenta un diseño especial que combina los colores patrios en un bordado en la parte del pecho. Utiliza listones rojos, blancos y verdes para crear este diseño, que según Lucía, es apto para personas de todas las edades. La blusa se amarra al cuello mediante dos listones, dejando los hombros descubiertos y creando un elegante triángulo en la parte delantera y trasera.
A pesar de la calidad y belleza de su trabajo, Lucía no puede vender sus blusas por más de 100 pesos debido a la sensibilidad del público a los precios. Cada prenda le cuesta, en promedio, 50 pesos en materiales, sin contar el tiempo invertido en su elaboración, lo que significa que gana otros 50 pesos por cada blusa vendida.
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Lucía trabaja en un punto de la plaza donde borda sus creaciones y todas las blusas en su aparador tienen el mismo precio. Ella destaca que, aunque los productos textiles de los pueblos originarios de Chiapas son elegantes y hermosos, a veces enfrentan discriminación por parte de quienes, a pesar de gustarles, dudan en comprarlos.
A pesar de las modestas ganancias y las limitadas ventas diarias, Lucía se muestra feliz y agradecida por la oportunidad de representar a su pueblo, Chamula, en la capital. Junto a sus hijos, considera que les va bien y continúa recomendando sus textiles con los colores patrios a la población, alentándolos a descubrir la calidad, belleza y sabiduría transmitida por sus antepasados.
Además de las blusas con los colores patrios, Lucía también elabora otros diseños con fondos blancos, rojos y negros, siempre pensando en satisfacer el buen gusto de la población de Tuxtla Gutiérrez, a quienes agradece su hospitalidad y aprecio por los textiles de Chamula, un pueblo en la región de Altos de Chiapas que sigue manteniendo viva su rica tradición textil.