El Zoológico Miguel Álvarez del Toro (Zoomat) alerta sobre el riesgo en qué se encuentran las aves que ahí se exhiben debido a la influenza aviar que se presenta en el país, y que pone en riesgo latente a la avicultura en general, expuso Joe Miceli Hernández, Coordinador Estatal para el Mejoramiento de de ese recinto faunístico de la Secretaría del Medio Ambiente e Historia Natural.
Indicó que el ZOOMAT definitivamente sierra sus puertas a la recepción de aves por parte de la población debido al brote peligroso de influenza aviar presente en el país desde principios del mes pasado.
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No podemos arriesgar a que al recibir un ejemplar se nos presente un brote, tenemos quétzal, águilas, neotropicales, estamos en alto riesgo en las aves, la avicultura a nivel nacional.
En cautiverio existen entre rapaces, psitácidos y crácidos unas 700 ejemplares de aves en resguardo, para establecer medidas de protección el zoológico ha establecido comunicación con el Sistema Nacional de sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria.
Tenemos especies en reproducción como el quetzal y las águilas neotropicales que están en un intenso trabajo de reproducción y de conservación, en este momento no vamos a decir aves hasta que pase la contingencia que inició en el país el mes pasado, abundó Miceli Hernández.
Empezó en el norte del país pero ya viene bajando, hay un dato de que en el centro del país acaba de haber la muerte de un halcón de una persona que se dedica al cuidado de animales, se confirmó que fue de influenza aviar, se está acercando, ahora es época de migración y las aves migratorias pueden portar el virus y transmitirlo con facilidad.
Reconoció que no solamente están en alto riesgo por la influenza aviar las Acer del zoológico Miguel Álvarez del Toro, sino toda la avicultura, con el Senasica, una instancia del gobierno federal, vamos establecer medidas que podríamos empezar a tomar.
Pero aunque no recibamos aves del exterior, la Reserva El Zapotal de 111 hectáreas, de las que el zoológico ocupa solamente 30, es un sitio al que llegan por sí solas las aves migratorias, y ello representa un riesgo de transmisión de la influenza aviar.
