Ante la crisis migratoria que se vive en Chiapas, puedes encontrarte muchas historias de migrantes que han tenido que dejar su país para poder darle una mejor calidad de vida a sus familiares, este es el caso de Leyder Medina, un joven venezolano que le apasionaba el arte de ser panadero y que por necesidad tuvo que migrar.
En entrevista nos cuenta que lo más difícil fue a travesar la selva el Darien, al llegar al lugar pensó en ya no avanzar y regresarse, pero en su camino e contro a personas lo que hizo menos pesado el camino, por lo que concluyó y ahora está en Tuxtla Gutiérrez.
Leyder viaja en compañía de su hermano, cuñada y sobrinos, mientras que sus papás se quedaron en Venezuela, el cual fue una de las razones por la que se salieron de su país, para poder darle a ellos una mejor calidad de vida.
La escaces, la economía y la inseguridad son las cosas más latentes en Venezuela; "si tienes trabajo, trabajas y comes lo suficiente, si no trabajas no come", dijo el venezolano.
Actualmente lleva 3 meses que salió fuera de su país, mientras que en Chiapas ya son 20 días, una de sus principales sueños al llegar a Estados Unidos es darle una casa a su mamá y ponerle su negocio de costura, ya que ella se dedica a eso, y a su padre ponerle un taller de mecánica, ya que es maestro de mecánica.
Él en Venezuela se dedicaba al arte de panadería y pastelería, lo que para ellos es una pasión que lleva desde muy pequeño, en donde siempre le ha gustado, pero por el sueño americano tuvo que abandonarlo.