El espíritu navideño ha llegado a Tapachula, las casas se llenan de luces y colores, pero hay una que resalta entre todas por la dedicación, esmero y amor a la navidad.
La familia Pundt Domínguez, cada mes de diciembre, desde hace más de 30 años, 80 inflables y más de 30 mil luces iluminan “El Jardín Navideño”, ubicado en la Avenida “Las Palmas” de la colonia “Los Laureles 1”.
Martin Pundt, abrió las puertas de la también conocida “La Casa de la Navidad” a Diario del Sur e indicó que tiene más de 30 años que iniciaron con esta tradición de adornar la casa con luces e inflables, los cuales han adquirido en la ciudad y otros a nivel nacional e internacional.
“Iniciamos esta actividad con un nacimiento que se ponía y el primer inflable que pusimos fue un reno, para que posteriormente se fueran adquiriendo cada día más hasta contar con todos los que se utilizan para adornar todo el jardín de este hogar en estas fechas”, abundó.
Lee también: Nochebuena la planta más vendida en los viveros de Berriozábal
Explicó que para instalar todos los adornos en el jardín se llevan alrededor de dos meses antes de la llegada del mes de diciembre, ya que se tiene que revisar todas las luces, los inflables, las esferas y adornos navideños que se colocan a lo largo y ancho del hogar.
“La casa se abrió hace 10 años a petición de los ciudadanos tapachultecos que nos pedían que abriremos para que se pudieran tomar unas fotos y desde entonces así se mantiene, también instalamos una cafetería, sin embargo, la cerramos por la presencia del coronavirus”, expresó.
Añadió que todas las personas que gusten ingresar a la casa lo tienen que hacer con cubreboca, mantener la sana distancia, aplicarse gel y realizar el pago de 25 pesos por persona para la recuperación de lo invertido y el pago de la energía eléctrica.
“Lo que se cobra realmente no alcanza para recuperar lo invertido en años para adornar nuestro hogar de esta manera, pero la verdad ver los rostros de felicidad de los niños que acuden con sus padres nos damos por bien pagados, pues nos recuerda la felicidad que nos daba a nosotros cuando éramos pequeños con mi hermana”, abundó.
Aseguró que eso les hace invertir cada año más recursos para seguir adornando “El Jardín Navideño”, al que llegan familias completas por una foto a este lugar mágico para los más pequeños de los hogares tapachultecos.
“Las personas ya nos consideran como un lugar tradicional al que viene a tomarse una foto del recuerdo en estas fechas de alegría, amor y paz para los ciudadanos de la Perla del Soconusco”, finalizó
