San Cristóbal de Las Casas.- Marcelo Pérez Pérez, Sacerdote Diocesano quien ha sido parte de los diálogos en el caso de Pantelhó, agradeció la solidaridad y el acompañamiento “en este caminar para la construcción de la paz en los pueblos, en este contexto de violencia generalizada y estructural no es nada fácil”.
“Muchas gracias por nos hemos topado con muchos obstáculos, sin embargo tampoco sea imposible, porque creo que la paz en los pueblos es más importante que los peligros, la misma vida personal, las dificultades; creo firmemente en Jesucristo, humilde carpintero de Nazaret, el gran constructor de la paz, quien dio su vida por la paz, liberación y la salvación de cada ser humano”, citó en un mensaje.
Apuntó que en este caminar (refiriéndose al tema de Pantelhó) hay una gran alegría en medio de tantas dificultades, ya que la paz no es una meta, sino un estilo de vida que se lleva el corazón, que fortalece el corazón para seguir adelante.
Te puede interesar: Aún hace falta la renuncia de la alcaldesa de Pantelhó: obispo de San Cristóbal
“Todas y todos estamos llamados por la vida a construir la paz, independientemente de su si o no creer en dios, desde nuestros distintos trabajos y opciones de vida podemos construir la paz, por ejemplo los y las periodistas son grandes tejedores de la paz informando la verdad”, añade.
Pérez Pérez pidió elevar plegarias al Dios de la paz, y los que no creen en Dios, envían un fuerte abrazo pues, anima y fortalece mucho el corazón de los abrazos solidarios.
“Sigamos caminando, que las dificultades sean oportunidades y fuerzas, que nada nos detenga para la construcción de la paz, que ni la muerte sea un muro que impida a seguir adelante, porque en la vida y en la muerte somos constructores de la paz. Que viva la paz, que viva la humanidad, que viva la construcción de la paz, que viva la vida. Que vivan las niñas y los niños, que vivan los ancianos y ancianas”, concluyen.
Confía obispo que la paz llegue en comunidades en conflictos como Aldama y Chenalhó
San Cristóbal de Las Casas.- “El corazón humano que se niega a reconciliarse, que se niega a escucharse mutuamente, que se niegan a caminar juntos, pero se van dando pasos, no perdemos la paz y esperanza que se puedan resolver”.
Fue el comentario del Obispo de la Diócesis de San Cristóbal Rodrigo Aguilar Martínez, al ser cuestionado sobre los conflictos que se siguen suscitando entre comunidades de Santa Martha, municipio de Chenalhó y Aldama, donde por muchos años han mantenido un conflicto por los límites territoriales.
Ante el anunció de una marcha en el municipio de Simojovel, exhortó a buscar otras manera de manifestarse, ya que por la variante Delta del Covid-19, que está a todo lo que da en el número de contagios, los pone en riesgos, por eso es importante que busquen otro método como las oraciones, “que se busque sostener las legalidad pero con justicia, con verdad, para que haya auténtica paz”.
A pregunta expresa de que en este mes se definirá quien sea el próximo presidente de San Cristóbal, de acuerdo aun resolutivo, Aguilar Martínez, consideró importante se sigan los procesos legales y que tanto las autoridades y la ciudadanía, nos dispongamos a un ejercicio democrático en el que somos corresponsales y responsables de llevar el desarrollo integral de la comunidad.
