El personal médico de las Clínicas de Atención a Enfermedades Respiratorias Covid-19 enfrenta tres riesgos, estrés, contagio y sentimiento de impotencia, el confort de las unidades médicas es diferente en esta etapa de la pandemia, no debe haber margen de error y todas las acciones tienen que ser casi perfectas.
De acuerdo con el médico clínico Rómulo Urtuzuastegui y García, de la Clínica Covid-19 de Tuxtla Gutiérrez, los equipos médicos son una prioridad para hacer frente a la pandemia, ha sido un cambio rotundo las determinaciones para enfrentar esta realidad.
De acuerdo con el médico clínico Rómulo Urtuzuastegui y García de la Clínica Covid-19 de Tuxtla Gutiérrez, los equipos médicos son una prioridad para hacer frente a la pandemia, ha sido un cambio rotundo las determinaciones para enfrentar esta realidad. El personal médico tiene que llegar más temprano, ponerse el traje cómodamente, para lo cual se requirió un curso especializado al principio de la emergencia sanitaria, es todo un ritual, es incómodo, hay sudor, estrés, suda la careta, el gorro, se empañan los lentes o los gogles, se rompen los guantes o se mancha la bata, overol o las botas y también es fundamental saberlo quitar.
Reveló que al principio siempre nos preguntábamos qué hacer y cómo, nos enfrentábamos a algo desconocido que a estas alturas de la pandemia lo sigue siendo, en Tuxtla Gutiérrez se fundaron las Clínicas Covid-19, se dotaron de equipos y contar con todos los insumos necesarios ha sido fundamental para la sociedad porque desde las unidades médicas se ha ido cortando la cadena de contagio haciendo buen la atención médica.
Los médicos se están convirtiendo en grandes especialistas, no hay margen de error, ni de equivocación, hay que hacer todo, no podemos fallar para vencer la pandemia, hay que proteger la salud desde el hogar, en unidades médicas y salvar vidas.
