Renato López, adolescente indígena que cambió los libros por el trabajo

Roberto López, es un indígena tsotsil de 14 años de edad, originario Chamula, por la pandemia tuvo que dejar sus estudios para trabajar aseando calzado

Isaí López | El Heraldo de Chiapas

  · jueves 28 de abril de 2022

Roberto López, es un indígena tsotsil de 14 años de edad, originario Chamula, por la pandemia tuvo que dejar sus estudios para trabajar aseando calzado / Foto: Isaí López | El Heraldo de Chiapas


Roberto López, es un indígena tsotsil de 14 años de edad, originario Chamula, por la pandemia del SARS COV2 (Covid-19), abandonó la escuela desde el 2020, migró primero a San Cristóbal de Las Casas, en busca de mejores condiciones de vida, y el destino lo trajo a Tuxtla Gutiérrez, ahora dice que es feliz, gana su dinero aseando calzado, ya no piensa en su natal perteneciente a la región Altos de Chiapas.

Ve el futuro de otra manera, primero sus ingresos, no habló de su familia, solo de sus amigos, Máximo López y Alex López, no son parientes, solo amigos, tienen la misma edad, y juntos caminan la plaza central de Tuxtla Gutiérrez esperando que contraten sus servicios de asear calzado, dicen que su trabajo está garantizado, es decir, hasta que se acabe el brillo del calzado del cliente.


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La capital ha recibido una carga migratoria, principalmente de los pueblos indígenas, el que más aporta es precisamente Chamula, y Roberto López, un adolescente que en su rostro refleja la felicidad por su permanente sonrisa, da cuenta de ello, dice que ya no se acuerda del Carnaval de Chamula, solo sus familiares, pero él prefiere seguir acá, trabajando, sumando recursos para la familia.

Dice que así como muchos otros rentan un pequeño cuarto para vivir, el también, en el centro de la capital, entre mil 500 y 200 mil pesos, que saldan entre varios, solo están todos para dormir, al amanecer se dispersan, siempre buscando clientes, en el día obtienen ingresos de entre 180 pesos y 270 pesos, a veces que menos, pero dice que es feliz buscando siempre los recursos para aportar a la familia.



Dice que abandonó la escuela por pandemia, estaba en secundaria, la falta de tecnología no le permitió seguir en línea, no se desespera ni se lamenta, su familia como la de muchas, es trabajar desde temprana edad, el tenía que seguir los pasos de sus familiares, trabajar en algo y lo más práctico es ser aseador de calzado o lo que otros llaman "bolero".

Cuenta que participa en el pago de la renta, está con amigos y familiares, no se arrepiente de dejar la escuela, no sabe si en algún momento lo retomará, pero en lo que si cree es que puede salir adelante en su condición de indígena y de bajos recursos económicos.