Más de una treintena de obras, entre óleos y esculturas, integran la exposición Rafael Coronel. La melancolía del ser, abierta en el Museo de Arte de la Secretaría de Hacienda para rendir homenaje al artista zacatecano por el 90 aniversario de su natalicio y recordar la vigencia de su producción que va desde sombríos monjes, frailes, santos y muertos hasta demonios que se debaten entre la realidad y la fantasía de un universo crudo.
La exposición se caracteriza por presentar exclusivamente obra que Coronel entregó desde 1978 y hasta su muerte en 2019 al programa Pago en Especie de la Secretaría de Hacienda como parte de su participación en la contribución tributaria. De estas entregas se formó un acervo de más de 30 piezas que hacen un muestrario del desarrollo de su producción artística.
“Nos pareció importante sacar el acervo de Rafael Coronel por el valor de su obra que es muy actual, uno la ve y se sigue sorprendiendo de sus personajes”, apuntó Alicia Muñoz Cota, directora del Museo, donde permanecerá la exposición hasta el 27 de febrero.
La directora destacó que en la obra de Coronel se percibe la esencia del ser humano, uno de los temas centrales de toda su pintura. También manifiesta tristeza, soledad y melancolía de los personajes a los que retrató a partir de las personas que veía en la calle: personas marginadas y desvalidas.
También en su pintura y escultura se percibe una fuerte referencia a los mitos, las leyendas y las historias populares sobre magos y hechiceros originarios de Zacatecas que escuchó cuando era niño. A ello responde el uso de las máscaras como símbolo del pretender ser otro o el deseo de adquirir virtudes o poderes fantásticos. Su pasión por las máscaras lo llevó a coleccionar más de diez mil piezas en su casa de Cuernavaca.
La curaduría de la exposición se compone por cuatro núcleos de acuerdo al diálogo entre las mismas obras. El recorrido inicia con Naturaleza y abstracción, que comprende obras de la serie Biombos tropicales, uno de los temas menos conocidos del artista y que está integrada por grandes telas relacionadas con palmeras y follajes.
Sigue con Personajes revelados, que son retratos de seres extraídos de la realidad, vistos en un callejón o en algún poblado, y en los que más allá de mostrar a seres humanos, refieren a conceptos universales como la melancolía, el dolor, la tristeza y el abandono.
El trayecto continúa con Magia en bronce que son personajes que cobran dimensión en sus esculturas oscuras, misteriosas y mágicas, los cuales llevan vestimentas como mantos, sombreros, máscaras y bastones al estilo de los tiempos medievales. La muestra cierra con Puesta en escena donde estos personajes surgen de oscuras atmósferas con un singular dramatismo teatral para crear escenas cargadas de expresividad y fuerza.
“Esta exposición es la primera de varias que queremos producir con la obra de grandes maestros que están en el acervo de la Secretaría de Hacienda y vale la pena rescatarlos, reavivar nuestra colección que es muy grande”, apuntó Muñoz Cota.
