En el Día del Trabajador de la Radio y Televisión, el veterano locutor Carlos Rafael Coutiño Camacho, con 21 años de experiencia al frente de los micrófonos, hace un llamado a la reflexión sobre el papel de la radio en la sociedad actual.
Para Coutiño Camacho, esta celebración no debería centrarse en homenajear a los locutores, sino en reconocer y felicitar a quienes realmente importan: el público. Aquellas personas que sintonizan la radio desde sus hogares, automóviles o en el transporte público son los verdaderos motivos de existencia de los trabajadores de la radio.
El locutor enfatiza que la radio debe cumplir con los tres objetivos fundamentales establecidos por la Ley Federal de Radio y Televisión: informar, educar y entretener. Lamentablemente, sostiene que en la radio actual, estos propósitos han sido relegados, y la educación ha perdido su lugar en favor del entretenimiento superficial.
Según Coutiño Camacho, la responsabilidad de regresar a los principios fundamentales de la radio recae en los dueños de las estaciones. Cada estación de radio debe decidir si desea ser un medio que informa, educa y transforma, o si se enfoca exclusivamente en objetivos económicos, perdiendo así su esencia.
El veterano locutor también señala un declive en la calidad de la locución a lo largo de los años. Afirma que muchos locutores carecen de la habilidad de comunicar con respeto y responsabilidad frente al micrófono y su audiencia.
Coutiño Camacho critica el actual enfoque en el morbo en la radio y destaca la falta de seriedad y responsabilidad entre las nuevas generaciones de locutores. En su opinión, la juventud actual busca la fama y el dinero fácil en lugar de enfocarse en el verdadero significado de la locución.
El locutor hace un llamado a recuperar valores perdidos y a fomentar la educación a través de la radio. Destaca que algunos programas musicales, como los de marimbas, han mantenido estos valores, pero la responsabilidad recae en encontrar locutores comprometidos y con conocimiento pleno de las palabras que transmiten.
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En un mundo donde las redes sociales y la información superficial ganan terreno, Coutiño Camacho enfatiza la importancia de comprender el significado de las palabras y no permitir que la radio caiga en la mala interpretación de los mensajes.
Finalmente, el locutor lamenta que el público ya no identifique a los locutores con seriedad y respeto, y que se esté perdiendo la verdadera función de la radio. En lugar de recibir saludos y muestras de cariño en la calle, los locutores pasan desapercibidos, lo que es un síntoma de la pérdida de relevancia de la radio en la sociedad.
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En este Día del Trabajador de la Radio y Televisión, Carlos Rafael Coutiño Camacho nos recuerda que la radio tiene un papel fundamental en la formación de la sociedad y que es responsabilidad de todos recuperar sus valores perdidos.
