De acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), durante el período 2018-2022, Chiapas logró una reducción del 10.6% en su población en situación de pobreza, superando a otros estados en esta importante métrica, surgiendo el estado con la mayor reducción.
De acuerdo con el estudio, lo que ha ayudado a la reducción han sido las obras que se han destacado, una de ellas, el Tren Maya, así como la refinería de Dos Bocas y el Tren Interoceánico, empleando mano de obra chiapaneca.
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Además, los programas sociales implementados en la región y el aumento del salario mínimo también han desempeñado un papel crucial en esta reducción de la pobreza, brindando apoyo directo a quienes más lo necesitan y mejorando las condiciones de vida de la población.
Chiapas experimentó un crecimiento del 20% entre 2018 y 2022, reflejando un aumento en el ingreso y la calidad de vida de sus habitantes. La reducción de más de 10 puntos porcentuales en la tasa de pobreza es un indicador del impacto positivo que estas medidas han tenido en la población.
Sin embargo, a pesar de estos avances, Chiapas sigue siendo el estado con la mayor población en situación de pobreza en el país.
Según datos del Coneval, alrededor de ocho de cada 10 habitantes son pobres y la entidad presenta la mayor población en situación de pobreza extrema multidimensional y por ingresos.
A nivel nacional son 10 municipios indígenas en situación de pobreza, en donde cinco se encuentran en Chiapas, sumando un total de 611 mil 780 personas en dicha situación.
Ocosingo era la localidad con más personas indígenas en situación de pobreza, con una población de 199 mil 762, seguido de Chilón con una población de 130 mil 699 personas, Chamula con 98 mil 982 personas, Las Margaritas, cuenta con una población indígena pobre de 93 mil 945, San Cristóbal de las Casas con 88 mil 392 personas en situaciones precarias, mientras que el municipio de Chanal, tiene un 99.1% de la población bajo condiciones de pobreza, lo cual muestra una ligera mejoría respecto a 2015, cuando apareció en el lugar número cuatro con 99.6 por ciento, la siguiente demarcación en la evaluación de Coneval es Chalchihuitán, que tiene a un 98.8% de su población sumida en la pobreza y cuya población es hablante principalmente de Tzotzil.
A pesar de estos desafíos, los esfuerzos continuos para abordar la pobreza en Chiapas combinados con inversiones en infraestructura y programas sociales efectivos, son fundamentales para lograr un desarrollo equitativo y sostenible en la región.
