Varios partidos políticos en Chiapas van a desaparecer debido a que sus liderazgos no tuvieron la capacidad de mantener el barco navegando contra viento y marea.
Llaman la atención partidos satélites como Chiapas Unido, Mover a Chiapas y el Partido Encuentro Solidario Chiapas serán los primeros en irse al no cumplir con el número de votos. Y claro que la prueba será la elección de junio, donde además quedará demostrado que únicamente pusieron candidatos y candidatas a modo, es decir, para puro relleno y no le harán contrapeso a Morena.
En otros escenarios será el Partido del Trabajo que se va a posicionar donde ya representa un bastión, mientras en otros municipios como Unión Juárez, ya impusieron el viejo estilo del PRI, no sumarán ni alcanzarán la regiduría. Falló su estrategia de Abundio Peregrino, pero ganó su ambición y cerrazón.
En el caso del Partido Verde Ecologista de México, lo que se ha ventilado y observado recientemente es que a los candidatos y candidatas les están dando la instrucción para que “muten”, es decir se vayan a fortalecer al Partido Redes Sociales Progresistas, este que será fuerza durante el próximo sexenio y que uno de los que contará con recursos, es decir, mucha paga para lograr ese objetivo fundamental.
Y una muestra clara ha sido que a Jorge Luis Llaven Abarca lo llevará el PT como su abanderado al senado de la República. Hoy la caballada Verde está muy flaca, la están debilitando demasiado, y claro está que la culpa la tiene el exgobernador Manuel Velasco, quién se aferró en imponer a Sasil de León y también en seguir atizando el fuego para que ella impugnara el proceso de designación del coordinador estatal de Morena en Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar, el virtual gobernador, quién nada más espera la elección del 2 de junio para cumplir con este mero trámite, mientras sigue sumando, fortaleciendo y llamado a la unidad al pueblo chiapaneco.
Estas mutaciones, son claras, únicamente nos envían un mensaje que habrá partidos políticos en la entidad que han cavado su tumba y están a nada de extinguirse como ha sido en todos los sexenios.
REFLECTORES
En menos de un año, el Instituto Nacional de Migración (Inami), nombró a dos titulares en Chiapas; uno de formación civil y otro de extracción militar, pero ninguno de ellos dio los resultados para lograr una migración segura, pero sobre todo ordenada en la frontera Sur. Por el contrario, la constante ha sido la corrupción descarada y denunciada por los migrantes, así como organismos de defensa de los derechos humanos.
En enero de 2023 llegó a Chiapas como titular del INM, Carlos Alberto Santiago Hernández, a pesar de contar con un turbio desempeño en Tabasco, lo que no importó al comisionado del Inami, ni a la Coordinadora Nacional de Delegados. Este llegó a organizar y encabezar una red de tráfico de humanos, en contubernio supuestamente con Fara Gertrudis, Sinhué Salgado, Raúl Aranda, Roberto del Pino Ruiz, Claudia Albores y Sheyla Díaz, solo por mencionar a algunos, quienes establecieron cuotas a los extranjeros para permitirles el paso libre y a pesar de las denuncias que obran en las oficinas de la FGR, los flamantes funcionarios siguen laborando, aunque a Santiago Hernández, lo regresaron a Tabasco, donde sigue haciendo de las suyas.
En mayo de 2023, el vicealmirante Roberto González López, asume la titularidad de migración en Chiapas, sin embargo, su desempeño deja mucho que desear, pues ni los mismos agentes lo conocen, por lo que los actos de corrupción se fueron al alza, aunado a ello los problemas que suceden en la oficina de Comisión Mexicana de Ayuda a Regugiados (COMAR) Tapachula, donde su titular sin la capacidad, ni perfil profesional para ocupar dicho cargo, sigue también haciendo negocios. Este tipo también ha sido denunciado por acoso y hostigamiento laboral pero lo protegen desde la Secretaría de Gobernación (Segob), como a los funcionarios de migración que cuentan con carpetas de investigación en la Fiscalía General de la República (FGR).
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