Pantelhó.- Más de una semana después de un acto vandálico que incluyó el vandalismo de la subestación en Chakaló y el derribo de cables de alta tensión en Chixté, comunidades en el municipio de Pantelhó se encuentran sin energía eléctrica. La situación afecta a 110 comunidades en Pantelhó y algunas en el municipio vecino de San Pedro Chenalhó.
Reynaldo Pérez Pérez, Defensor de Derechos Humanos en la región, acompañado de otros indígenas tzotziles, recorrió la zona afectada para evaluar los daños causados. Pérez Pérez destacó que el cable de alta tensión en la comunidad Chixté fue alcanzado por disparos, y la falta de reparación está afectando a un considerable número de comunidades.
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"Venimos a verificar los daños, y uno de los balazos alcanzó el cable de alta tensión en la comunidad Chixté. Urge que se reparen los daños porque son 110 comunidades que sufren ante la falta de la energía eléctrica en Pantelhó y también algunas comunidades de San Pedro Chenalhó se ven afectadas", señaló Pérez Pérez.
Aunque los responsables del acto vandálico son desconocidos, durante el recorrido se observaron colillas de cigarros en el área, lo que sugiere la posible relación con el daño a los cables de alta tensión.
Pérez Pérez instó al gobierno estatal y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) a reparar de inmediato los daños. Subrayó que los habitantes de Pantelhó son los más afectados por esta situación y condenó los actos vandálicos que persisten en el municipio, a pesar de la presencia de elementos del ejército, la Guardia Nacional y la policía estatal. La falta de energía eléctrica no solo impacta en la vida cotidiana de las comunidades, sino que también resalta la vulnerabilidad de la región ante este tipo de incidentes.
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