En el corazón de la entidad, el Carnaval Zoque Coiteco emerge como una vibrante celebración que fusiona las raíces de tres culturas: la árabe, la cristiana y la zoque. Con inicio el domingo anterior al miércoles de ceniza, esta festividad se erige como una de las más grandiosas de la región.
La esencia de este carnaval radica en la riqueza de la cultura zoque, una herencia ancestral que honra al "padre sol". El ritual se remonta a ofrendas de vasijas de maíz, acompañadas por la música envolvente de flautas de carrizo y tambores. Ataviados con vestimentas ostentosas y coloridas, los participantes buscan captar la atención de los dioses para recibir bendiciones de lluvias y cosechas abundantes.
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La festividad se despliega en seis Cohuinás, casas de fiesta estratégicamente ubicadas en la ciudad, cada una representando la morada sagrada de un santo y un personaje del imaginario colectivo. Desde San Antonio y el Mahoma de cochi hasta Santa Martha y el tigre, cada rincón rezuma con la esencia de la tradición zoque.
En el escenario festivo, diversos personajes cobran vida con roles fundamentales. Desde los caporales hasta el Mahoma Goliat, pasando por los tigres, el caballito, los monitos y los chores, cada participante desempeña un papel crucial en el encanto y la vitalidad de la celebración.
La amalgama de música y danza folklóricas crea un espectáculo cautivador que involucra tanto a los oriundos como a los visitantes. El Carnaval Zoque Coiteco se convierte así en una plataforma donde todos pueden sumergirse en una gama de actividades culturales y artísticas de forma gratuita, tejiendo vínculos entre las comunidades y preservando con orgullo la rica herencia zoque.
