La cárcel no fue un impedimento para que Leonel León Soriana tuviera deseos de salir adelante, y es que decidió estudiar una carrera mientras se encontraba recluido en El Amate, en una entrevista para este medio nos cuenta como fue este proceso por el que tuvo que pasar.
León Soriana debido a un mal carácter termino recluido en "El Amate", este no fue su mejor aliado, a consecuencia de decir palabras y malas acciones no midió las consecuencias y lo llevaron preso en el 2020, por fortuna y con el pasar del tiempo estos malos entendidos pudieron resolverse, estando 3 años y medio recluido y salió en libertad absuelto y sin ningún cargo.
"Es una situación difícil caer en El Amate, llegar allá porque la vida se termina. Se termina porque uno tiene planes, ilusiones, sueños, no solo personales, si no como familia y al caer en una prisión como lo es El Amate, los sueños se acaban", dijo Leonel.
Como en todo lugar, explicó Soriano, hay gente con ganas de superar, y en una prisión también lo hubo, el antes de ser recluido ya tenía la licenciatura en Educación Artística, pero se acercó un licenciado de apellido Sarseno, quien fue que lo invitó a estudiar otra carrera.
Soriano se interesó y le explicó Sarseno que esta licenciatura era a distancia por parte de la Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH), presentó sus papeles al área administrativa, quienes son los encargados de hacer el trámite, aunque su barrera fue el certificado de prepa, ya que no lo tenía a la mano, tuvo que volver a estudiarlo en línea para recuperarlo y logró inscribirse a la licenciatura.
Para él fue gratificante estudiar la universidad dentro de prisión, esto es una distracción, así como poner a prueba tu conocimiento, donde ponen lo mejor de sí para obtener buenas calificaciones, aunque muchas veces, indicó León Soriano, las personas lo que menos piensan es hacer otra carrera.
"Al estar allá adentro tenía que ver como emplear mi tiempo, la situación ahí era tan difícil que me decían que iba a estar de 30 a 60 años. Por eso les decía que cuando les dicen esas fechas o esos años piensa que la vida ya se acabó." Dijo.
A través del SEUNE de la UNACH donde se encuentra la carrera de Gestión de la micro, pequeña y mediana empresa, Leonel comenzó el estudio, para él era complicado por el tiempo, la señal del Internet, la escasez de material. Fuera de casa la universidad maneja horario abierto, para los reclusos es un tiempo límite.
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La principal barrera a la que se enfrentó fue el Internet, provocando que las calificaciones mermaran, por lo que cuando estaba bien la red aprovechaban para avanzar. Estudió dentro de El Amate, un año de bachillerato y 2 años de carrera, cuando fue liberado le faltaba un semestre y ese lo terminó fuera de la cárcel.
Dentro de la cárcel habían mil 600 presos, de ese universo solo 34 estudiaban la carrera, dentro ellos había quienes tenían dificultades y dejaban la carrera o perdían un semestre, mientras que otros ya van por la segunda carrera, sacando provecho del tiempo que se encuentre recluido.
Para León Soriano su esposa fue un pilar fundamental, quien lo motivaba a diario para salir adelante, además lo apoyaba con el material necesario para que aprendiera más, además comenta que los compañeros se animaban entre ellos.
Para Leonel no fue fácil la vida allá adentro por el desapego familiar, sus hijos que preguntaban por el, pero en el proceso aprendió a salir de los problemas, así como a echarle ganas al estudio, por lo que pidió que se promueva más la educación dentro de estos centros penitenciarios, para que así se motiven a estudiar.
